Yotuel Romero, cantante de Orishas, habló de la censura que el gobierno de Cuba les impuso

La nueva canción de la agrupación pionera del hip hop cubano, Orishas, dice apoyándose en un himno de Pablo Milanés, Ámame Como Soy: “no tengas miedo a levantar la verdad de tu voz, digo yo, escucha, si la verdad, aunque sea dura nunca ofende, por el contrario, cuando viene con respeto y claridad eso se defiende”.

Su sencillo, titulado ‘Ámame Como Soy Yo’, es una respuesta a la censura recibida por la banda musical, por parte del gobierno cubano, que pretendió silenciar su canción anterior, Ojalá Pase, publicada en enero, al bajarla de las plataformas digitales. Pero que se convirtió en un himno para el pueblo, al ser un rap acronicado sobre las carencias que enfrenta su pueblo.

En esta ocasión, a Hiram Riverí Medina (El Ruso), Roldán González Rivero y a Yotuel Omar Romero Manzanares (Guerrero), los acompañan la cantautora española y esposa de Yotuel, Beatriz Luengo, y el violinista libanés Ara Malikian.

Hablamos con Yotuel Romero, vocalista líder de Orishas.

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¿Ámame Como Soy Yo es una continuación de Ojalá Pase, su censurada canción anterior? ¿No temen el mismo ataque?
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Son hermanitas gemelas, aunque de diferentes padres. En Ámame Como Soy Yo, contamos lo que pasó con Ojalá Pase, todo este intento de desprestigiar a la banda de parte del régimen cubano y de la isla por el mero hecho de estar del lado del pueblo y de hablar en voz alta por el pueblo.

Eso más que debilitarnos, nos llenó de más coraje para que el mundo conociera lo difícil que es en Cuba decir lo que uno piensa, expresar sus sentimientos. Por eso Ámame Como Soy Yo viene con esta carga de libertad.

¿Cómo recibieron que los llamaran terroristas musicales?
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Mira, mientras que el pueblo no nos llame así, ni nos censure, a nosotros lo que nos diga el régimen cubano nos da igual, no nos importa. Porque no estamos del lado de ningún gobierno, sino del lado del pueblo, lo que el gobierno diga, como decimos los cubanos, perdóname la palabra: “nos vale tres pingas”.

Que uno pasa un mal rato, que uno ve los ridículos que hace el régimen cubano en intentar desprestigiarnos con alegaciones absurdas, pues sí. Respetamos su criterio, como decimos en Ámame Como Soy Yo, pero que también respeten el nuestro, mala está la cosa cuando yo te respeto a ti y tú no me respetas.

¿Siendo una canción sobre Cuba, cómo estuvo la interacción cultural en esta canción, donde además de cubanos, participan la vocalista española Beatriz Luengo y el violinista libanés Ara Malikian?
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Ha sido una mezcla que aunque distinta, es muy productiva, porque todos los que estamos envueltos en esta canción, la sentimos en el corazón, en el alma.

Desde Bea, una voz bella, preciosa, muy talentosa, que ha vivido a mi lado, en carne propia, este intento fallido de desprestigiar a la banda y ha sentido mucha impotencia, y dice: “pero esta gente qué se cree, que tienen el derecho de opinar y el pueblo cubano no y tienen que seguir como corderos”.

Nadie la iba a cantar con tanto sentimiento como ella. Y Ara es un periodista considerado por la revista Rolling Stone como el artista clásico del siglo XXI; un libanés de origen armenio, un tipo que como yo, a temprana edad, se fue en busca de la libertad. Al escuchar la canción le conmovió tanto que la sintió suya, e hizo este solo de violín tan bello.

“La clave de llevar 17 años juntos con Beatriz ha sido el respeto y la admiración. Que nos amiguemos no solo profesionalmente, tú y tu esposa, tú y tu ayudante en la vida, tú y tu aventurera”, Yotuel Romero, cantante, compositor, actor y productor musical.

El video está a cargo de un cineasta cubano, Asiel Babastro. ¿Qué pretendían expresar con este?
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Le dejamos la libertad a Asiel de que escuchara la canción y reflejara en imágenes lo que sintiera. El video es íntegramente su idea, a mí me encantó. El resultado es brillante.

¿Cómo se vive en Cuba este momento de pandemia y aislamiento?

Con mucha dificultad, de hecho, aislamiento no ha habido mucho, la gente está en la calle intentando comprar comida. Los artistas hacen donaciones para ayudar a los más necesitados, como lo hicieron Carlos Vives, Silvestre Dangond, o como lo estamos haciendo desde Miami en una iniciativa.

Hay que ver si el Gobierno deja que esa ayuda se le entregue al pueblo. La situación en Cuba está gravísima, hay un desabastecimiento alimenticio brutal, la gente no ha podido hacer un confinamiento real, está en las calles mirando a ver de dónde saca la comida, las imágenes las puedes ver en Internet.

Es difícil cuando tampoco el Gobierno te garantiza una ayuda alimenticia. Hay un descontento muy grande del cubano de a pie, que quiere que las cosas mejoren, pero cada vez es peor la situación, más triste, cada vez se caen más las casas, esa Habana vieja, linda, es La Habana derrumbe.

¿Ámame Como Soy Yo es un llamado a su familia, que lo rechazó por criticar al gobierno cubano?
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Es muy triste que uno de los pilares fundamentales de la vida, la familia, se sienta roto por la ideología que nos han sembrado en Cuba. Esto no viene desde ahora, viene desde el tiempo de la revolución.

Esta división política de la familia es un mal irreparable que ha creado la ideología comunista.

Conozco gente de derecha en España que no se te echa encima ni te agrede, ni te niega su amistad, sin embargo, en Cuba por decir que no estás de acuerdo con la política del régimen, tu familia te desplaza, te abandona, te quita el habla.

Vivió primero en París, ahora en Miami, ¿qué lo haría volver a Cuba?
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Ahora mismo volver a Cuba es una cosa futurista, con esto del confinamiento, hay que pensar cómo echar para adelante, hay que pagar el agua, la luz, el coche, el colegio del niño, las medicinas, ahora mismo la idea de visitar a Cuba es lejana.

Yotuel vivió el racismo en Cuba. “Allá los negros solo tenemos dos opciones, ser deportistas o cantantes”. Una vez iba con su esposa ‘Bea’ por la calle y le dijeron a ella: “¡Vaya, atrasaste la raza!”.

A sus 11 años, él se formó en la Escuela Nacional de Waterpolo de Cuba hasta los 19. Cuenta que al nacer él, su madre perdió mucha sangre y le extirparon los ovarios. “Le dijeron que no podría tener más hijos. Yo era el primero y le dijo a mi padre: ‘Ya siempre seremos tres: yo, tú, él’. Así nació mi nombre”.