Cali celebra 'La noche rosada', el evento anual por la prevención del cáncer de mama

Cuando la mamografía se introdujo en los países desarrollados, como parte de los exámenes anuales en pacientes sanas, se logró reducir en un 30 % la mortalidad por cáncer de mama. Sin embargo, esta enfermedad aún ocupa el primer lugar en el mundo como causa de muerte en mujeres con cáncer, entre los 40 y 50 años.

Prevenirlo no es posible, pero detectarlo a tiempo sí. De allí que la Fundación Valle del Lili y la Universidad Icesi, se unan en octubre, mes mundial de la lucha contra el cáncer de mama, para realizar ‘La noche rosada’. Evento que desde hace 13 años busca concientizar a las mujeres de Cali de que el cáncer de mama es una realidad a la que todas están expuestas.

‘La noche rosada’ es un evento gratuito que convoca a las mujeres de la ciudad. La cita este año es el miércoles 4 de octubre a las 6:30 p.m. en el Hotel Dann Carlton de Cali.

Según cifras del Registro Poblacional de Cáncer en Cali, por cada cien mil mujeres de la ciudad, 49 padecen cáncer de mama. Sin embargo, la especialista en cirugía oncológica de la Fundación Valle del Lili y docente de la Facultad de Ciencias de la Salud de la Universidad Icesi, Diana Currea, cree que pueden ser muchos más los casos.
Por ello, ‘La noche rosada’ aspira a que las asistentes sean socializadoras de la información que se les brinda en esa velada y contribuyan a la reducción de mortalidad por este tipo de cáncer.

Para esta oportunidad, los invitados al evento son el doctor Óscar García, del Instituto Nacional de Cancerología, y el motivador Gonzalo Gallo. Después, habrá show musical a cargo de los ex integrantes del grupo ‘Niche’.

En Colombia se detectan anualmente 6999 casos de cáncer de mama y se estima que por cada 33 mujeres 1 padece esta enfermedad.

La especialista Diana Currea explica que, hasta el momento, el mejor examen para hacer detección temprana del cáncer de mama es la mamografía. Por lo tanto, las mujeres deben realizarse una de base a los 40 años. De ahí en adelante, de acuerdo a sus factores de riesgo y al criterio médico, se hace anualmente o cada dos años. Después de los 50, lo aconsejable es que se practique cada año.

Aquellas mujeres que tienen una familiar en primer grado de consanguinidad (madre o hermana) que haya sufrido de cáncer de mama, deben iniciar sus estudios 10 años antes de la edad en que a su pariente se le detectó. Es decir, que si una madre sufrió de este cáncer a los 40 años, su hija debe realizarse la primera mamografía a los 30.
El propósito de este tamizaje (examen) es evitar que las pacientes lleguen cuando la masa ya es palpable, porque por muy pequeño que sea el tumor, una lesión tan visible ya es un estado avanzado de la enfermedad.

Las posibilidades de curar un cáncer de mama son muy altas si la detección es temprana. Sin embargo, la mayoría de las veces la detección se hace de manera incidental, explica la doctora Marcela Vallejo, especialista en oncología de la Fundación Valle del Lili.

Según ella, esta enfermedad no suele tener síntomas. “Por lo general, cuando las pacientes acuden al médico con fuertes dolores en los huesos o en la zona abdominal y además, con dificultad para respirar, es porque el cáncer ya está en una etapa muy avanzada. Es decir, “que probablemente ha hecho metástasis óseas, hepáticas o pulmonares, las cuales son las más frecuentes”.

Ahora bien, este cáncer no solo lo pueden padecer las mujeres mayores. “La paciente más joven que he operado tenía 14 años y la más anciana, 100”, cuenta la doctora Diana Currea. Agregó, que en Colombia el autoexamen aún es una medida útil, porque se puede practicar a cualquier edad y en lugares sin acceso a equipo médico sofisticado.
Centro de Excelencia en Cáncer de Mama

‘La tarde rosada’ es otra iniciativa que busca beneficiar a las mujeres del Distrito de Agua Blanca. Este año será en el Hospital Primitivo Iglesias, el jueves 5 de octubre, desde las 2:00 p.m.

La Fundación Valle del Lili creó este nuevo centro en la ciudad, conformado por un equipo multidisciplinario y especializado en patología mamaria, para mejorar la atención de sus pacientes con este tipo cáncer.

Dentro del grupo de expertos están oncólogos clínicos, cirujanos oncólogos, mastólogos, radiólogos, radioterapeutas, genetistas, psiquiatras y enfermeras especializadas en oncología, entre otros.

En este Centro de Excelencia en Cáncer de Mama se practican cuatro tipos de tratamientos, de acuerdo a la estadificación del cáncer y de las características biológicas del tumor (detectadas a través de la biopsia). Estos son: la cirugía conservadora o radical, dependiendo del compromiso del tejido mamario, la quimioterapia, la radioterapia y la hormonoterapia.

Consuelo Ochoa, una mujer que recibió tratamiento en esta institución afirma que “la calidez del equipo médico es muy importante, así como el acompañamiento familiar que promueve la institución”.
Según la doctora Currea, en la mayoría de las familias, las mujeres son el centro del hogar, por lo tanto, hay que explicarle a su entorno familiar que lo ideal es que se comprometan con el acompañamiento a las pacientes.

Según las cifras de la Organización Mundial de la Salud, OMS, en 2015 fallecieron en el mundo, producto del cáncer de mama, 571.000 personas.