Así funciona la modalidad de extorsión de "falso servicio", que ha tomado auge en el Valle

“Aunque no sufrimos daños físicos, hasta el momento los integrantes del grupo sí presentamos daños psicológicos, nos da miedo salir a la calle o recibir llamadas de un número desconocido. Uno queda con ese temor de que lo pueden estar buscando para seguirnos extorsionando”, expresó Rubiel Quevedo, vocalista de un grupo de mariachis víctima de extorsión el pasado 15 de diciembre bajo la modalidad de falso servicio.

Los hechos ocurrieron cuando un sujeto identificado como Cristian llamó a la oficina del grupo musical y realizó una contratación para una serenata en San Pedro, zona rural de la vereda Matecito, Valle, aproximadamente a 83 kilómetros de Cali. La programación del toque se realizó para que ocurriera entre las 2 y 3 de la tarde.

Cuando los músicos se dirigían hacia esta zona recibieron la llamada del supuesto cliente, quien haciéndose pasar por otra persona, afirmó que se encontraban bajo la mira de un grupo al margen de la ley y que para poder ingresar a tocar necesitaban corroborar algunos datos.

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“Pero en realidad lo que estaban haciendo era llamando a nuestros familiares y pidiendole dinero a cambio de no hacernos daño”, relató Quevedo.

Los familiares de las víctimas realizaron dos consignaciones para un total de $2 millones, tras una negociación donde exigían $10 millones. Frente a estos hechos, las autoridades aseguraron que esta llamada fue realizada desde la cárcel de Cómbita, Boyacá.

La modalidad de falso servicio ha tomado gran auge en los municipios del Valle. El Mayor Carlos Cárdenas, comandante del Gaula de la Policía, explicó que “bajo esta modalidad los delincuentes, valiéndose de información de empresas o del sector comercial, aprovechan estos datos para servicios que no van a contratar. Por ejemplo, solicitan una cotización a una carpintería para hacer unos muebles en lugares con mala cobertura de señal telefónica, cuando las víctimas se aproximan al lugar acordado el victimario llama a la empresa o a los familiares y dicen que los trabajadores, que estaban haciendo la supuesta cotización, se encuentran bajo secuestro de un grupo armado ilegal y comienzan a exigir dinero”.

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Frente a los hechos vividos por los mariachis, Quevedo explicó que tuvieron que tomar medidas para evitar ser víctimas de esta modalidad de estafa, por lo que decidieron pedir una parte del dinero por adelantado. “Si una persona paga, nos asegura que está contratando nuestros servicios. También es importante pedir los datos personales como nombre del cliente y su identificación, para evitar futuros riesgos”, aseguró el vocalista de la agrupación.

Además, añadió que la comunicación con las autoridades es fundamental en estos casos: “Nuestras familias tuvieron una reacción inmediata para contactarse con las autoridades y cuando íbamos bajando de la vereda Matecito, la Policía ya nos estaba esperando para hacernos preguntas y para que colocáramos la respectiva denuncia. Luego de realizar la denuncia, las autoridades nos recomendaron cambiar nuestros números de celular y modificar las rutinas que teníamos, no transitar por los mismos lugares siempre y estar alerta ante cualquier comportamiento sospechoso de las personas que llaman a pedir una presentación musical”.

Otro caso de falso servicio en el Valle ocurrió a mitad de año tras la denuncia de doce personas, entre las que se encontraban transportadores, médicos, veterinarios, servicios funerarios y servicios de ferretería, los cuales habrían sido contactados para prestar sus servicios en zonas rurales de Cartago, Sevilla y Caicedonia.

Una vez arribaban a los sitios acordados, recibían llamadas intimidatorias por parte de un supuesto comandante guerrillero, quien los obligaba a suministrar información personal, familiar y laboral, para posteriormente contactarlos y exigirles grandes sumas de dinero a cambio de una supuesta liberación.

La Policía también habilito la línea telefónica 165 para atender los casos de denuncia frente a los delitos de extorsión y de secuestro en la capital del Valle.

Debido a esta denuncia fueron capturados en Cartago alias El gordo y ‘La gorda’, quienes fueron puestos a disposición de la justicia por los delitos de concierto para delinquir agravado, secuestro extorsivo y porte ilegal de armas de fuego.

De acuerdo con las investigaciones, estos delincuentes lograron recaudar en promedio $20 millones mensuales, producto de los secuestros y extorsiones que venían ejecutando desde hace año y medio.