Salvatore Mancuso podría quedar libre en las próximas horas por orden de una jueza

A pesar de que el jueves, 4 de julio, la Jurisdicción Especial para la Paz (JEP) había negado la libertad de Salvatore Mancuso como gestor de paz, el exjefe paramilitar podría quedar libre prontamente.

Y es que este viernes una jueza de ejecución de sentencias de Justicia y Paz levantó la medida de aseguramiento que estaba en contra él. Asimismo, según su abogado, se cancelaron las órdenes de captura en su contra emitidas por los juzgados de la justicia ordinaria.

La decisión tomada por la jueza abre la posibilidad de que el exjefe paramilitar recobre su libertad en las próximas horas, luego de que la sección jurídica verifique que Mancuso no sea requerido por ninguna otra autoridad.

“Yo recibo el proceso con la boleta de detención, y que estoy ordenando la cancelación y en la determinación que adopté sobre ese proceso, además le estoy diciendo a la cárcel que con ocasión de ese proceso usted (Mancuso), ya no es requerido, por lo tanto, puede entrar a gozar la libertad, a menos que sea requerido por otra autoridad judicial”, dijo la jueza Luz Marina Zamora Buitrago durante la diligencia judicial.

Por su parte, Nelson Menjura, abogado del exparamilitar, relató que lo que se decidió “fue cancelar las órdenes de captura que tenía Salvatore Mancuso por la justicia ordinaria en los procesos de Villavicencio y otros de Cúcuta, con lo cual se le da acceso inmediato a la libertad”.

Según él, la interpretación de esta orden “es sencilla” toda vez que la JEP le negó la libertad condicionada a Salvatore. “¿Qué buscamos nosotros a través de la libertad condicionada? Que se suspendieran las sentencias de la ordinaria que la doctora Luz Marina Zamora se había negado a suspender y a cancelar las órdenes de captura”.

Por ello, el jurista menciona que la libertad de Mancuso es inminente.

En cuanto a la decisión de la JEP, cabe recordar que, según el fallo, subrayó la prioridad de garantizar la seguridad jurídica y los derechos de las víctimas del conflicto armado. Esta medida refleja un enfoque cauteloso en la aplicación de los tratamientos penales especiales, enfatizando la centralidad de las víctimas y la necesidad de resolver adecuadamente las disputas de competencia judicial.