Capturan a cinco disidentes de las Farc en Tumaco, Nariño; tenían tremendo armamento

Las autoridades colombianas capturaron cinco presuntos integrantes de las estructuras ‘Bloque Occidental Alfonso Cano’ e ‘Iván Ríos’, de la Segunda Marquetalia, en área rural del municipio de Tumaco, Nariño.

Los resultados se dieron tras adelantar cuatro operaciones en los barrios Viento Libre, 11 de Noviembre, El Obrero y Plaza Nariño, donde fueron capturados en flagrancia los cinco sujetos.

De hecho, no se presentó confrontación armada durante los operativos. Para entrar a una de las viviendas donde estaban los criminales, tuvieron que derribar la puerta e ingresar por la fuerza.

En los operativos para darles captura les encontraron un tremendo armamento. Tenían en su poder seis pistolas, siete proveedores, una escopeta y 62 cartuchos de diferentes calibres, y 17 millones de pesos en efectivo.

Entre los detenidos se encuentra alias ‘Choy’, presunto coordinador de finanzas del Grupo Armado Organizado Residual Bloque Occidental Alfonso Cano.

Tanto los disidentes detenidos como el armamento y el dinero encontrados quedaron a disposición de la Fiscalía General de la Nación. Inicialmente, tienen que responder por el delito de fabricación, tráfico, porte o tenencia de armas de fuego, accesorios, partes o municiones.

Disidentes se rindieron en Buenaventura

Son ocho los presuntos integrantes de la columna móvil Libardo García de la disidencia de las Farc Segunda Marquetalia los que se rindieron y entregaron voluntariamente a las autoridades en Buenaventura, Valle del Cauca. Su entrega fue posible con la intervención de la Armada Nacional y la Defensoría del Pueblo.

Tras entregarse, los disidentes guiaron a las tropas de la Armada hasta un depósito de armas que tenían en la comuna 12 del distrito portuario.

En el depósito fueron hallados 21 fusiles, una ametralladora, una carabina calibre 22, un lanzagranadas, cinco granadas, 6.767 municiones de diferentes calibres, 95 proveedores de diferentes calibres, nueve detonadores eléctricos, cuatro metros de cordón detonante y un kilogramo de explosivo tipo anfo.

Los disidentes también entregaron cinco radios de comunicación, diez antenas para radio, 24 chalecos multipropósito pixelados y un brazalete alusivo a la Segunda Marquetalia.

“Los sujetos que se entregaron se encuentran en custodia de la Armada, se les han respetado sus derechos, brindado garantías, han tenido acompañamiento de la Defensoría del Pueblo y la Pastoral Social. Además, serán beneficiarios de las posibilidades que ofrece el reintegro a la sociedad civil”, dijo José Manuel Arboleda Michaels, segundo comandante y jefe de Estado Mayor de la Brigada de Infantería de Marina n.° 2.

Según información de inteligencia de la Armada, estos disidentes de la Segunda Marquetalia tenían azotados los ríos Yurumanguí, Cajambre, Raposo y Mayorquín. En estos lugares de la zona rural de Buenaventura se enfrentaban constantemente con la disidencia Jaime Martínez por el control de las economías ilegales. Dichas confrontaciones han generado masivos desplazamientos hacia el casco urbano de Buenaventura.

“Con el sometimiento de estos sujetos se logra afectar contundentemente la estructura criminal y sus economías ilícitas en la zona rural de Buenaventura al dejar de recibir las ganancias por el tráfico de estupefacientes y el cobro de extorsiones en el sector. Asimismo, se niega la expansión de la Segunda Marquetalia en el litoral Pacífico”, agregó Arboleda.

Otros casos

Por otro lado, el 30 de marzo, miembros del Ejército Nacional capturaron a tres presuntos integrantes de la red de apoyo al grupo disidente Adán Izquierdo en la vereda Alegrías, corregimiento de Cumbarco de Sevilla, Valle del Cauca.

Estos sujetos estarían dedicados a diferentes actividades ilícitas, como homicidio agravado y porte ilegal de armas de fuego, y serían, además, los autores materiales del homicidio de Wilmer Alexánder Riaño Carreño, ejecutado en el corregimiento de Cumbarco, el pasado 15 de enero.

Así mismo, estarían vinculados con hurtos, cobro de extorsiones producto de la minería ilegal sobre las veredas de Maulen, Cebollal, La Unión y Alegrías, generando zozobra e incertidumbre en los municipios de Sevilla, Caicedonia y Tuluá.

Los tres hombres, que tenían órdenes de captura emitidas por el juzgado Tercero Penal Municiapl, quedaron a disposición de las autoridades competentes para las labores de judicialización.