¿Deben continuar los bombardeos de las Fuerzas Militares? Esto dicen expertos en la materia

El ministro de defensa, Iván Velásquez, confirmó el miércoles pasado la ejecución de bombardeos en el departamento del Cauca, una acción que pone fin a dos años sin este tipo de operaciones en el país. Según Velásquez, estos bombardeos no estuvieron dirigidos a objetivos humanos, sino que tuvieron como misión garantizar la seguridad de los soldados que debían desplegarse en la región.

La acción se dio luego de que las disidencias de las Farc atacaran con un explosivo, que fue lanzado desde un dron, hacia una cancha sintética de fútbol en la que solo había civiles y, producto del ataque, murió un niño de 10 años y seis personas más resultaron heridos en zona rural de Argelia, Cauca.

En declaraciones a la prensa, el Ministro explicó que los bombardeos fueron necesarios para asegurar una llegada segura de las tropas al territorio, especialmente debido a la alta probabilidad de existencia de minas y otros artefactos explosivos en la zona. “Hubo bombardeos para facilitar la llegada al territorio de soldados. No hubo bombardeos contra objetivos humanos”, recalcó.

El almirante Francisco Cubides, comandante de las Fuerzas Militares, respaldó las declaraciones del Ministro y dijo que “las Fuerzas Militares no tienen ningún sitio vedado en el territorio colombiano y que las únicas capacidades de la Armada, de la Fuerza de Ejército están obviamente al servicio de los colombianos. Insisto, este tipo de operación nunca ha estado restringida”.

¿Hay que continuar con los bombardeos?

Uno de los primeros en pronunciarse tras conocer que fueron ejecutados bombardeos en el Cauca fue el alcalde de Cali, Alejandro Eder: “Colombia no puede ceder ni un centímetro ante el terrorismo. Todo el apoyo a nuestra Fuerza Pública, en especial a nuestra Fuerza Aérea”.

Por su parte, el coronel retirado Carlos Soler, experto en seguridad nacional y abogado, dijo que “hay que celebrar que el Gobierno haya autorizado la continuación de una ventaja estratégica como lo son los bombardeos. Es importante decir que el no bombardear dejaba muy tranquilos a los terroristas por el territorio colombiano”.

“Los bombardeos del miércoles, como no fueron contra un campamento, se llaman de ablandamiento y lo que se hace es abrir una brecha. Esto es necesario y esta ventaja estratégica debe ser empleada en toda Colombia porque el Gobierno por fin, después de dos años, está entendiendo lo que entendió el Gobierno de Juan Manuel Santos en su momento”, sostuvo Soler, y añadió que con la acción del miércoles pasado se vuelven a activar las naves, se vuelve a entrar en la dinámica de la precisión y de los informes de inteligencia para bombardeos.

Por su parte, para Héctor Herrera, experto en seguridad, “los bombardeos son vitales a la hora de hacer operaciones militares donde hay alta presencia de subversivos, pues hacen más fácil que las tropas puedan realizar desembarcos, evacuación de heridos, llevar alimentación y municiones. Eso sí, es vital hacer muy bien las labores de inteligencia para evitar que vayan a quedar niños en medio del conflicto y que no sigan siendo asesinados a raíz de la guerra”.

“Quien comete el crimen de guerra no es quien bombardea, quien lo comete es quien recluta el niño, lo uniforma, le pone un fusil y lo coloca en la mitad del campamento, cuando los guerrilleros hacen eso lo vuelven un blanco lícito en el marco del Derecho Internacional Humanitario. Eso, a pesar de que es duro, es lícito porque el Ejército con termo calor y a 10.000 pies de altura no puede medir la edad de las personas, pero sí puede ver un grupo ilegal con armamento. Solo en los seis meses recientes en el departamento del Cauca han reclutado 270 niños indígenas”, finalizó el coronel Carlos Soler.