Ejército neutralizó alrededor de 15 disidentes de las Farc en el municipio de Timbiquí, Cauca

La guerra en el departamento del Cauca, al parecer, no se detiene. Este domingo 8 de septiembre, el Ejército confirmó que por lo menos quince disidentes de las Farc fueron neutralizados en medio de combates que se registraron en el municipio de Timbiquí.

De acuerdo con la versión entregada por el comandante de la Tercera División del Ejército, general Giovani Valencia Hurtado, los enfrentamientos se desarrollaron cuando los militares llegaron a este punto de la costa pacífica caucana, tras ser alertados de la presencia de los alzados en armas por parte de la comunidad campesina.

“Este grupo realizaba crímenes en contra de la población civil y el medio ambiente, además eran responsables de delitos graves como narcotráfico y la explotación ilícita de yacimientos mineros. Según información de inteligencia, los pobladores de la zona habrían sido instrumentalizados por esta organización ilegal para alterar la escena de los hechos para obstruir la labor de las autoridades”, agregó el oficial.

El general Valencia también reportó la captura en flagrancia de un integrante de este grupo armado al margen de la ley, luego de resultar herido en medio de las confrontaciones, las cuales se registraron en medio de la población civil.

“Al señalado disidente, tras resultar herido, se le brindaron las atenciones prehospitalarias por parte de los enfermeros de combate. Igualmente en esta operación se incautaron nueve fusiles, una escopeta, más de 2.200 unidades de munición de diferentes calibres, una mira telescópica para francotirador, así como material alusivo a las disidencias, equipos de comunicaciones y otros elementos de intendencia pertenecientes al grupo armado”, precisó el comandante de la Tercera División del Ejército.

A pesar de las acciones humanitarias realizadas por los militares, se ha podido establecer que otros cinco combatientes murieron y seis resultaron heridos, aunque al parecer sus cuerpos fueron removidos ilegalmente por algunos civiles que habrían sido instrumentalizados por el grupo criminal, lo cual obstaculizó las labores de los funcionarios de la Sijín y del CTI de la Fiscalía.

Por medio de amenazas, los grupos armados ilegales utilizan a la población civil para alterar la escena de los hechos, interrumpir las operaciones militares y dificultar la acción de las autoridades. Sería una táctica recurrente de las disidencias lideradas por alias Iván Mordisco.

“Este comportamiento ha sido visto en varias regiones del Cauca, como en el corregimiento de El Plateado, Argelia, donde la población civil ha sido forzada a colaborar en las actividades criminales, poniendo en riesgo su seguridad y bienestar”, explicaron integrantes del área de inteligencia del Ejército al exponer que al interceptar las comunicaciones de esta guerrilla, comprobaron que son por los menos quince disidentes los que perdieron la vida en estos choques armados.

Lo realizado por parte de esta organización armada ilegal en esta región del país deja en evidencia, una vez más, su actuar delictivo, de ahí que para las autoridades son “responsables de graves crímenes, como homicidios, extorsión, amenazas a líderes sociales, narcotráfico, explotación ilícita de recursos naturales y el reclutamiento forzado de menores. Estos actos delictivos han afectado gravemente a las comunidades locales, en especial a aquellas que intentan subsistir de actividades económicas legales”.

En respuesta, las Fuerzas Militares han reforzado su presencia en la zona para localizar a los demás integrantes de esta estructura criminal y garantizar la seguridad de la población, especialmente de las comunidades campesinas e indígenas que buscan liberarse de la influencia de estos grupos narcotraficantes.

El oficial militar agregó que esta operación se dio en el marco de la Operación Mantus, que se adelanta en el suroccidente del país, las Fuerzas Militares mediante acciones ofensivas de control y presencia institucional propinando un duro golpe a la estructura criminal, la cual controla corredores estratégicos del narcotráfico en el Cañón del Micay, con conexiones hacia el Pacífico colombiano.

“La acción militar se realizó bajo estricta observancia del Derecho Internacional Humanitario (DIH) y el respeto por los Derechos Humanos (DDHH), con el fin de neutralizar a los criminales sin afectar a la población civil y protegiendo a las tropas desplegadas en la zona”, puntualizó el general Giovani Valencia Hurtado.