Estudiante de los Andes que se quitó la vida por posible matoneo habría buscado por internet qué pasa con la deuda del Icetex si el deudor muere

La salud mental se ha convertido en un tema de suma importancia en la comunidad académica en Colombia, en especial durante los últimos meses, en donde se han presentado varios casos de estudiantes universitarios que han decidido quitarse la vida por diferentes factores.

Precisamente, uno de los casos más sonados ha sido el de Sebastián Castellanos, quien decidió terminar con su existencia en julio de este año. Según sus allegados y familiares, Castellanos habría tomado esta decisión a raíz de presiones económicas y por el constante matoneo que, al parecer, recibía por parte de compañeros y en especial de sus profesores.

En medio de las investigaciones pertinentes sobre este caso, las autoridades encontraron un desgarrador detalle sobre las posibles razones de Sebastián. Se trata de su última búsqueda en su navegador de internet, en la cual indagó si su deuda sería perdonada en caso de que muriera.

¿Si uno muere se condona la deuda con el Icetex?, se lee en la búsqueda del desesperado estudiante de medicina, quien no venía de una familia adinerada y su única opción para entrar a la Universidad de Los Andes, una de las más caras del país, fue por medio de una beca con el Icetex.

El convenio se trataba de que si Castellanos podía terminar la carrera, todos los semestres los asumiría el Icetex, pero que si por alguna razón Sebastián no podía o se retiraba, tenía que asumir el valor total de los semestres.

Cabe recordar que Castellanos estaba en cuarto semestre, y teniendo en cuenta que cada uno vale cerca de $34 millones, la deuda del estudiante ascendería a cerca de 140 millones de pesos.

Como pudo conocer SEMANA, estas razones serían uno de los detonantes de la fatídica decisión tomada por el joven. Esto sumando a un posible caso de matoneo sistemático por parte de compañero y académicos. Así lo confirmó Oliva Romero, madre de Castellanos, en diálogo con dicho medio.

Por esa razón, se abrió una investigación para determinar responsabilidades en la muerte de Sebastián. Según una de las compañeras de clase del joven, todo habría empezado cuando llegó de manera anónima un correo a la facultad de medicina cuestionando el trabajo de los docentes.

“Para final de semestre les llegó un correo de profesores de cuarto semestre: Olga Sarmiento, el doctor Jhon Mario, Ricardo Peña, Diana Cañón; a algunos de tercero también les llegó. Con copia a Diego Vivas y Natalia Mejía (decana de Medicina). El correo decía que los profesores eran unos vagos, que se la pasaban repitiendo parciales, y eso era un fraude. Era un semestre donde se hacía fraude a niveles descarados”, dijo la allegada del joven, además de aseverar que dichos docentes crían que el autor del mensaje era Sebastián por lo que algunos tomarían represalias.

“La mamá me contó que Sebastián sufrió bullying de la profesora de Patología, Diana Cañón. Es una profesora hecha a la antigua, me refiero a punta de maltrato. Humilla a los estudiantes, les dice brutos, vagos, ineptos, incompetentes. Los grita, los trata mal, los agrede. Yo fui agredida físicamente por ella; me sacó a empujones del salón y me rasguñó, simplemente porque no recordaba mi cara”.

Lo cierto es que por ahora, se sigue adelantando las pesquisas por parte de las autoridades para determinar si las denuncias hechas por parte de familiares y allegados de Sebastián tiene cabida en responsabilidad legal de las personas que, supuestamente, estarían involucradas.