Gonzalo Cardona, líder ambientalista, fue asesinado en zona rural de Tuluá

Gonzalo Cardona Molina, coordinador de la Reserva ProAves Loros Andinos y guardián del loro orejiamarillo, fue asesinado en jurisdicción de la vereda La Unión, zona rural de Tuluá.

El líder ambientalista fue reportado como desaparecido el pasado viernes 8 de enero, cuando fue visto por última vez en el camino que conduce de Barragán hacia Roncesvalles (Tolima).

La fundación Proaves, a la cual estaba vinculado Cardona Molina, hizo un llamado urgente a las autoridades este lunes para que lo ubicaran sano y salvo.

Sin embargo, según confirmaron medios nacionales en la tarde de este lunes, el cuerpo sin vida del líder ambientalista fue hallado en inmediaciones de la vereda La Unión.

Desde la Gobernación del Tolima aseguraron que están en coordinación con las autoridades vallecaucanas para trasladar los restos de Gonzalo Cardona hasta Roncesvalles.

"No tenemos registrada ninguna amenaza, por lo que apenas se finalice con el levantamiento comenzaremos con el proceso de investigación, que pasará a manos de la Fiscalía" dijo el secretario del Interior, Alexánder Tovar, al diario local El Nuevo Día.

De acuerdo con la fundación Indepaz, se trata del primer líder ambientalista asesinado en el 2021, tan solo 11 días después de haber comenzado el año.

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Gonzalo Cardona Molina estuvo vinculado con ProAves desde 1998, resaltó la fundación en su sitio web.

"Desde hace 23 años cuando ProAves llegó a Roncesvalles, departamento de Tolima, lugar de donde es oriundo Gonzalo, con el sueño de salvar al loro orejiamarillo (ognorhynchus icterotis) de su extinción en Colombia, él comenzó a trabajar por la conservación de la biodiversidad de su municipio, labor que ha cumplido con gran vitalidad y rigor hasta la fecha".

Cardona Molina centró sus intereses y sus esfuerzos en proteger al loro orejiamarillo, convirtiéndose en una de las personas con mayor conocimiento de la especie en el país, así como en un experto de la Palma de Cera del Quindío, árbol nacional de Colombia. 

"Durante más de dos décadas, él ha apoyado a ProAves en expediciones, censos y monitoreos que han aportado a la historia natural del loro orejiamarillo y de otros loros andinos. Igualmente, ha acompañado con su sello de alegría y espontaneidad durante todo este tiempo a los visitantes del páramo de La Yerbabuena, lugar donde la Fundación ejerce fuertes labores de conservación a través de su área protegida. Gonzalo siempre nos ha inculcado su amor incondicional por la naturaleza y nos ha enseñado que 'uno tiene que amar el medio ambiente, esas cosas las va llevando uno en el corazón'", destacaron desde la fundación.

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