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Hurto de viviendas en Cali, un delito que no cede: estas son las zonas donde más se está atracando y las modalidades que usan
Pese a la reducción de la mayoría de delitos de alto impacto, el robo a residencias está en aumento.
A pesar de que la mayoría de las modalidades de hurto se han reducido en Cali en lo corrido del año, los robos a residencias son un indicador que continúa en números rojos, por lo que las autoridades buscan disminuir su concurrencia en la capital vallecaucana.
Cabe resaltar que en el área metropolitana se presentaron 1040 casos entre el 1 de enero y el 15 de agosto de 2024, según la Policía, y de acuerdo con datos del grupo de información de criminalidad de la Dirección de Investigación Criminal e Interpol, en Cali se presentaron 655 hechos entre el 1 de enero y el 31 de agosto.
Ante el aumento del 17 % en este tipo de delitos se busca reducir este indicador con el fin de revertir la tendencia, por lo que, desde la Policía de Cali, se aseguró que la prevención por parte de la ciudadanía es la clave, pues en algunos casos el descuido de los habitantes de las viviendas ayuda a que los delincuentes ingresen a robar.
De acuerdo con el mayor Ricardo Arias, jefe del grupo de Policía Comunitaria de Cali, el factor de oportunidad ha sido determinante en el aumento de estos crímenes en el transcurso de 2024, por lo que, además de tener medidas de seguridad efectivas como cerraduras fuertes, rejas o candados, también es importante la relación entre vecinos, ya sea en apartamentos, conjunto cerrado o en casas de barrio.
“Al no existir esa corresponsabilidad social y no conocer a los vecinos con quienes se debería estar generando convivencia en lugares de residencia, aparece un factor de oportunidad para los delincuentes ya que los ciudadanos no alertan a la Policía cuando alguien sospechoso entra a una vivienda, porque realmente no saben si vive allí o no”, sostuvo el uniformado.
Cabe destacar que el secretario de Seguridad y Justicia de Cali, Jairo García, aseguró que en la ciudad están disminuyendo los ilícitos de alto impacto, incluyendo las modalidades de robo. “Por ejemplo, el hurto a personas ha caído en 8 %, a comercio en 29 %, a motos en 13 %, en el MÍO en 44 %; el único delito contra el patrimonio que no está disminuyendo es en contra de las residencias. Ya estamos trabajando para revertir este comportamiento”.
El enfoque de las autoridades en reducir algunas modalidades puede ser uno de los motivos por los que los criminales se han trasladado al ataque a las casas, de acuerdo con el consultor en seguridad y paz, Felipe Fernández. “En el caso de que la Policía se esté enfocando en otras formas del ilícito como en el hurto a personas, los criminales migran a donde tienen mayor oportunidad”.
El sur de la ciudad, zona afectada por la delincuencia
El jefe del grupo de Policía Comunitaria de Cali detalló que aunque este es un delito que se está presentado en toda la ciudad, una zona afectada es el sur, ya que hay más soledad en las calles, situación aprovechada por los delincuentes para ejecutar sus planes delictivos.
“Hemos tenido casos, especialmente en el sur de la ciudad, donde tenemos el mayor número de bloques de apartamentos y desafortunadamente la comunidad no tiene una interacción entre sus vecinos, no hay un monitoreo ni una verificación de quienes son las personas con las que conviven”, sostuvo Arias.
Además, la agilidad de los ladrones para engañar también influye en las cifras de este crimen, pues ingresan a los conjuntos cerrados haciéndose pasar por residentes sin ser detenidos.
Por otra parte, Felipe Fernández explicó que “históricamente el sur de Cali, asociado al estrato socioeconómico más alto, tiene una mayor afectación relacionada con el hurto a viviendas porque previamente las bandas se dedican a hacer inteligencia a las casas donde no hay mayor seguridad ni cohesión comunitaria”.
Estas son las modalidades más utilizadas
De acuerdo con los datos del grupo de información de criminalidad de la Dirección de Investigación Criminal e Interpol, que cuenta con cifras de la Policía Nacional, 255 de los hurtos a residencias registrados en Cali con corte al 21 de agosto se cometieron sin utilizar armas, pero en 198 hechos fue implementada la modalidad de palanca para lograr ingresar a las viviendas.
De la misma manera, en 117 hechos los criminales emplearon objetos contundentes para cometer estos delitos, 35 de los crímenes fueron cometidos con arma de fuego, 34 con llaves maestras y se denunciaron 13 actos en los que se utilizó escopolamina para dejar a los habitantes del domicilio sin la capacidad de defenderse y poder robar todas sus pertenencias.
Sobre el tema, Carlos Soler, abogado, consultor y asesor en seguridad y defensa nacional, añadió que el robo a residencias requiere generalmente de delincuentes especializados que analizan cada escenario para conocer el momento perfecto para atacar. “Son casas que dejan solas en ciertas horas, no tienen cámaras de seguridad y estas bandas de criminales cuentan con campaneros que los alertan y expertos en abrir las chapas para ingresar sin mayores problemas”.
Estrategias para desincentivar el delito
Según el Secretario de Seguridad de la ciudad, se está trabajando en tres dimensiones: “Primero en un tema de pedagogía con los frentes locales de seguridad, segundo con una mayor articulación con las empresas de vigilancia privada, y tercero, con el componente de judicialización”.
Con este fin, los funcionarios se han acercado a los frentes locales de seguridad para brindar todas las herramientas que permitan que los vecinos se organicen y puedan aportar información de valor a las autoridades para prevenir estos delitos.
“Venimos reactivando frentes de seguridad y les dimos una caja de herramientas, que es una guía para su funcionamiento”, añadió Jairo García.
Por su parte el jefe del grupo de Policía Comunitaria de Cali aseguró que la institución está promoviendo campañas residenciales para concientizar y sensibilizar a la comunidad con el fin de que eviten malas prácticas que se conviertan en un factor de riesgo. Estas actividades se realizan a través de escuelas para la convivencia que se desarrollan en varios puntos de la ciudad.
Adicional a ello, el Secretario de Seguridad, Jairo García, afirmó que se están fortaleciendo las relaciones y la comunicación con las empresas de vigilancia para que las autoridades puedan reaccionar de una manera más oportuna “y por supuesto desde la Sijín de la Policía se avanza en nuevas investigaciones para lograr desmantelar las bandas detrás de este crimen”.
Por su parte, Felipe Fernández expresó que es vital que los líderes de los barrios tengan acercamiento constante con las autoridades para alertar sobre cualquier hecho sospechoso.
Además, el consultor en seguridad concluyó que “los patrullajes son disuasivos, esto apunta al principio de oportunidad desde una perspectiva criminológica. Por otra parte, un buen alumbrado público da una sensación positiva de seguridad, pero no significa que con estas variables se evite en un 100% la comisión de delitos”.
