Hombre y su perrita fueron rescatados tras sobrevivir dos meses a la deriva en el océano

Un marinero australiano y su mascota fueron rescatados por un barco pesquero frente a las costas de México después de naufragar en el Océano Pacífico por más de 60 días. Tim Shaddock y Bella, el nombre al que responde la perrita, salieron desde la ciudad costera de La Paz en México en abril y planeaban navegar unos 6 mil kilómetros (3.700 millas) para arribar en la Polinesia Francesa tropical.

Sin embargo, poco después de iniciar esta travesía, una fuerte tormenta dañó la embarcación del marinero y sus equipos electrónicos, lo que impidió que pudiera comunicarse para solicitar rescate o avanzar en su recorrido por el imponente océano.

A pesar de que era poco probable, el navegante fue rescatado más de dos meses después por un barco atunero mexicano. “Acabo de conseguir equipo de pesca”, contó el hombre a uno de los rescatistas en un video revelado por el medio Nine News, de Australia.

Tras la dura experiencia que atravesó junto a su fiel compañera, el hombre reveló detalles del naufragio y sus esfuerzos para sobrevivir. Según contó el marinero de 51 años, visiblemente demacrado, logró mantenerse con vida con la dieta espartana de mariscos, que se basa en pescado crudo. Este era el único alimento al que tenía acceso en el mar y, para no deshidratarse, el hombre tuvo que ingerir agua de lluvia.

“He pasado por una prueba muy difícil en el mar”, reconoció el hombre en otra grabación, a la vez que dijo que se siente “con muy buena salud”. Tras la difícil odisea que parece sacada de una película, Shaddock detalló que ahora se tomará un tiempo para relajarse. “Solo necesito descansar y comer bien porque he estado solo en el mar mucho tiempo”, dijo.

Entre el equipo rescatista que viajó en el barco atunero para auxiliar a Shaddock se encontraba un médico, quien en la noche de este domingo 16 de julio comentó que el náufrago está “estable y muy bien” de salud. De acuerdo con el medio Nine News, el australiano y su mascota serían transportados a México.

Naufragio mortal

Más lejos, menos expuesta, pero igualmente peligrosa, la ruta de Canarias, puerta de entrada a Europa en pleno océano Atlántico, experimenta un resurgimiento de la migración desde las costas africanas, donde es presentada como una “alternativa” al Mediterráneo.

Desde hace varios días, la ruta marítima que separa el archipiélago español del oeste africano y del Magreb vuelve a dar de qué hablar.

Al menos tres embarcaciones, que partieron de Senegal con más de 300 migrantes a bordo, son declaradas desaparecidas, según la ONG Caminando Fronteras.

Una de ellas habría partido, según la ONG, de la pequeña ciudad costera senegalesa de Kafuntine, a 1.700 kilómetros de las Islas Canarias.

Otros barcos improvisados salen de las costas de Marruecos y del territorio disputado del Sáhara Occidental. Desde allí, son 450 km de una navegación peligrosa.

“Los migrantes van cada vez más lejos y asumen riesgos cada vez mayores. La ruta de las Canarias está considerada como una de las más mortíferas”, explica a la AFP Sara Prestianni, especialista en el tema de la ONG EuroMed Droits.

“Esta opción se utiliza como alternativa frente al refuerzo de los controles en las fronteras” a las puertas de Europa, detalla.

Desde mediados de 2022, un acuerdo entre Rabat y Madrid condujo a una mayor vigilancia del estrecho de Gibraltar y de los dos enclaves españoles de Ceuta y Melilla, en la costa norte de África.

El 24 de junio de 2022, una tentativa de paso del muro que rodea Melilla por exiliados subsaharianos fue reprimida con sangre.

En los últimos meses, las llegadas clandestinas a las Islas Canarias habían disminuido. El primer ministro socialista español, Pedro Sánchez, se felicitó incluso a mediados de abril por el hecho de que la “ruta atlántica”, hacia el archipiélago, era “la única ruta en Europa” donde el número de entradas irregulares disminuía, mientras aumentaban en el Mediterráneo central, hacia Italia. Todo gracias al “aliado esencial” marroquí.