Mundo
Huracán Otis: Consulado de Colombia en México confirma 24 colombianos afectados
Las autoridades informaron que han establecido contacto con algunos de los ciudadanos colombianos.
Desde el Consulado de Colombia en México indicaron que van 24 casos de personas colombianas que han sido afectadas por el huracán Otis, el cual ha dejado un rastro de destrucción a su paso. Según el reporte de las autoridades internacionales, las fuertes corrientes de agua registraron daños en la infraestructura y causaron cortes en el suministro de electricidad y agua potable.
Durante este viernes, 27 de octubre, se han registrado 24 casos de ciudadanos colombianos afectados por el huracán Otis, de los cuales 16 se encuentran en proceso de localización, mientras que nueve ya han sido localizados exitosamente y se ha emitido un pasaporte exento.
“El Consulado de Colombia en Ciudad de México sigue en comunicación constante con las autoridades locales para continuar con el proceso de localización y atención de nuestros connacionales y de aquellos que lo requieren”, citó el Consulado de Colombia en México.
Hay que resaltar que se han establecido diversos medios de comunicación con el fin de que se les pueda brindar asistencia a los ciudadanos colombianos y sus familias. Por otro lado, se sugiere a los connacionales seguir las recomendaciones de las autoridades locales y tomar las medidas de precaución necesarias.
Las líneas de emergencia que se estableció fue la +52 5528453988 y el correo electrónico que está disponible es cmexico@cancilleria.gov.co.
Por último, el Consulado General de Colombia en México expresa sus condolencias a las víctimas de esta catástrofe natural, así como a sus familiares, las autoridades y al pueblo de los Estados Unidos Mexicanos.
Emergencia en México
Cuando se registró esta emergencia, las comunidades costeras se vieron gravemente afectadas por el huracán Otis.
Por ejemplo, en Acapulco, numerosos residentes adquirieron agua y alimentos de última hora, mientras que tanto comercios como viviendas tomaron medidas preventivas, como cubrir sus ventanas con tablones de madera o cinta adhesiva en forma de X.
El puerto reporta una ocupación hotelera del 50 %, según informaron representantes de la industria turística, quienes instaron a los visitantes a permanecer en sus hoteles como medida de seguridad. Además, el Gobierno ha habilitado más de 500 albergues para las personas que residen en áreas de alto riesgo.
El paso del huracán Otis ha dejado, hasta el momento, un trágico saldo de 27 personas fallecidas, cuatro personas desaparecidas, hoteles y comercios parcialmente destruidos, y comunidades sumidas en la oscuridad y aisladas. Otis impactó la región del Pacífico mexicano como un huracán de categoría 5, la máxima en la escala Saffir-Simpson.
“Se recibió el reporte del gobierno del estado y del municipal de 27 personas fallecidas y cuatro desaparecidas”, dijo la secretaria de Seguridad, Rosa Icela Rodríguez, durante la conferencia de prensa presidencial.
Este es el primer informe sobre las víctimas, ya que la zona afectada había quedado prácticamente incomunicada desde la medianoche del martes, cuando los vientos del huracán, que alcanzaban velocidades de 270 km/h, comenzaron a azotar la región.
El presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, hizo un llamado a la población del estado de Guerrero, donde muchas comunidades enfrentan la pobreza, instándoles a buscar refugio. “Les insto a trasladarse a refugios y permanecer en lugares seguros, manteniéndose alejados de ríos, arroyos y barrancas. Permanezcan alerta y eviten la complacencia”, escribió López Obrador en su cuenta de Twitter.
El gobierno local tomó la decisión de suspender las clases y posponer la presentación del informe anual de gestión, priorizando las tareas de prevención, tal como se indicó en un comunicado oficial. Acapulco tiene un triste recuerdo de la fuerza devastadora de los huracanes, ya que el 9 de octubre de 1997, el huracán Paulina azotó la ciudad, tocando tierra como una tormenta de categoría 4, causando una tragedia con más de 200 víctimas fatales. Este evento se mantiene como uno de los más mortales en la historia de México.