Las razones por las que Nayib Bukele impulsa el Bitcoin en El Salvador

La figura de Nayid Bukele se impuso en las urnas este domingo, quien consiguió ser reelegido como presidente de El Salvador, obteniendo cerca de 1,3 millones de votos en los primeros resultados oficiales, con un 31,49 % del escrutinio.

Con un 85 % de los votos con los que anunció su victoria en el reencuentro oficial, Bukele aseguró su segundo mandato en El Salvador para el periodo 2024-2029.

Desde el Palacio Nacional, el Presidente celebró ante los cientos de salvadoreños que se reunieron el centro histórico de la capital, tras conocerse los primeros resultados.

“En conjunto, la oposición quedó pulverizada. Este día, El Salvador ha roto todos los récords de todas las democracias en toda la historia del mundo”, dijo Bukele, junto a su esposa en el balcón del edificio. “Nunca un proyecto ganó con la cantidad de votos que hemos ganado este día. Es literalmente el porcentaje más alto de toda la historia” aseguró el Mandatario.

Con esto, el reelecto podría continuar con la estrategia Bitcoin, que ha llamado la atención, pues en el 2021 Bukele posicionó a El Salvador como el primer país en reconocerla como una moneda legal.

Su enfoque para adaptar el Bitcoin en el país centroamericano ha generado discusiones ante la mirada nacional como internacional. El Mandatario ha impuesto con esta iniciativa, en el marco de lo legal, emitir los primeros respaldos por Bitcoin.

Desde entonces, se ha realizado inversiones nacionales en Bitcoin, reducción de impuestos para empresas de tecnología como Blockchain. Además, se creó una visa para inversores extranjeros de Bitcoin. Desde esta perspectiva, el Jefe de Estado de El Salvador tiene planes para la creación de una “Ciudad Bitcoin” impulsada por la energía de volcanes.

Con esto, se espera que el Gobierno de El Salvador lance los llamados “Bonos Volcán”, respaldados por esta criptomoneda, que tendrá una duración de 10 años.

Por último, Bukele añadió, en medio de su discurso de victoria de este domingo, que “El Salvador pasó de ser el (país) más inseguro al más seguro. Ahora en estos próximos cinco años esperemos a ver qué vamos a hacer”, en referencia a sus políticas de seguridad destinadas a reducir la violencia de pandillas.