“Manténgase firmes”, esto dijo Erik Prince, empresario militar y mercenario, que estaría apoyando a la oposición en Venezuela

El pasado sábado 11 de enero, la líder opositora María Corina Machado, quien permanece en la clandestinidad, recibió un espaldarazo para su proyecto político y su lucha por la democracia de Venezuela, cuando el empresario militar y mercenario norteamericano Erik Prince, jefe de la firma de seguridad Blackwater, ahora llamada Academi, replicó su mensaje de agradecimiento a Trump por brindar apoyo a la oposición en el país vecino.

En el mensaje, Prince comenta que el movimiento opositor Ya Casi Venezuela, que se dedica a recoger fondos para actividades que restituyan la democracia, estaría en contacto con él. Al final, afirmó: “Manténgase firmes”.

Esto ha sido interpretado por diferentes sectores como una seria amenaza al régimen de Maduro, puesto que la empresa dirigida por Prince, quien es un antiguo miembro de la Navy Seal, se dedica a ejecutar misiones de seguridad para contratistas estatales y privados. De hecho, su empresa ha recibido millonarios recursos del Departamento de Estado de EE. UU. y la CIA, para proyectos como cuidar las embajadas y otros que son clasificados.

En su momento, Prince fue acusado de formar grupos armados para asesinar terroristas, que él atribuyó a una persecución política. Sin embargo, su empresa sigue siendo contratada por el estado norteamericano.

La relación de Erik Prince con Ya Casi Venezuela podría apuntar a un plan futuro de derrocamiento de Maduro, han especulado algunos analistas y medios internacionales, puesto que el mercenario hace parte del círculo cercano del nuevo presidente de Estados Unidos, Donald Trump, quien no solo pidió apoyo para la oposición, sino que reconoció a Edmundo González como el presidente legítimo de Venezuela.

Vale recordar que el líder opositor Edmundo González, quien según las actas electorales custodiadas por la oposición, sería el ganador de las controvertidas elecciones del pasado 28 de julio en Caracas. Pese a que el régimen nunca exhibió las pruebas de que Maduro era el presidente electo, tanto el CNE y la Corte Suprema, dominadas por el chavismo, lo certificaron como tal.

Edmundo González había asegurado que retornaría de su exilio a Venezuela para juramentarse como presidente electo, pero la represión de la dictadura maduristas y la falta de garantías para su vida lo disuadieron de entrar a su país el viernes 10 de enero, cuando lo tenía planeado.