Video: legisladores en Georgia se fueron a los golpes en medio de votación de un polémico proyecto de ley

Durante una intervención ante la comisión del Parlamento que debate el proyecto de ley de agentes extranjeros, que ha vuelto a desatar la polémica en el país, el diputado y líder del opositor Partido de los Ciudadanos de Georgia, Aleko Elisashvili, le propinó varios golpes en la cara al líder del partido gubernamental Sueño Georgiano, Mamuka Mdinaradze.

La tensión en medio de la intervención aumentó cuando los diputados abordaron la medida mientras miles de personas se juntaban en torno a la sede del Parlamento en señal de protesta contra un proyecto que consideran propio de Rusia y que, según las voces críticas, mermará la libertad de expresión y los derechos fundamentales de la población georgiana.

Tras los hechos, la reunión de la comisión se ha suspendido de forma inmediata y los diputados, junto a los periodistas, tuvieron que abandonar el lugar.

“Nos están arrastrando hacia Rusia. No es momento para quedarse sentado en casa, debemos echarles (del Parlamento)”, aseguró Elishashvili en declaraciones a los medios tras la reyerta.

“Estaba cansado de todo esto y le di un puñetazo a este agente ruso en la cara... Siempre he tratado de comunicarme humanamente con el Sueño Georgiano, pero nos están arrastrando a Rusia... Este no es el momento de sentarse en debemos salir a las calles y expulsarlos junto con su ley [pro]rusa”, afirmó.

Cabe destacar que este proyecto obligará a registrarse como “agentes de influencia extranjera” a todas aquellas organizaciones, medios de comunicación y entidades similares que reciban al menos un 20 % de su financiación del exterior, una medida similar a las vigentes en Rusia.

El texto del proyecto de ley presentado, es el mismo que el de 2023, aunque con algunas modificaciones mínimas. No obstante, ya el año pasado la oposición y parte de la sociedad se manifestó en contra de esta propuesta legislativa por entenderla como una muestra de simpatía con Rusia.

Finalmente, el Gobierno, por su parte, rechazó estas acusaciones y defendió que la propuesta serviría para simplemente tener un listado de organizaciones financiadas desde el extranjero.