JuanColombia Vs USTrump
Es extraño que una persona con tantos problemas judiciales como Trump pueda aspirar a la presidencia.
“Ese juez me odia”, son las palabras de Donald Trump al referirse al juez colombiano Juan Merchán, encargado de fallar el caso contra el primer expresidente de los Estados Unidos acusado de 34 cargos graves y que lo podrían llevar a la cárcel.
Trump está acusado de pagarle a su abogado, hoy detenido, por servicios legales que no ejecutó para encubrir los pagos a Stormy Daniels y a la modelo de Playboy Karen McDougal, para comprar su silencio por relaciones extramaritales que tuvo Trump con ellas y que no quería que le afectaran su campaña política a la Presidencia. También por falsificar los registros comerciales para encubrir la mentira.
El juez Juan Merchán, nació en Bogotá, pero llegó a Estados Unidos a los 6 años. Su padre, un exmilitar retirado, y su madre fueron a buscar fortuna a Estados Unidos, haciendo labores domésticas. Juan creció en la pobreza de Jackson Heights en Queens, Nueva York. Sus padres con gran esfuerzo lo enviaron a la Universidad privada de Hofstra, donde se graduó de Abogado en 1994.
Juan Merchán tiene 61 años, ha trabajado siempre con el sistema judicial de la ciudad de Nueva York y se desempeñó como fiscal general adjunto en el condado de Nassau y el condado de Suffolk a principios de la década de 2000. En el 2006 fue contratado por el entonces alcalde Mike Bloomberg para ser juez en el tribunal de familia del Bronx. Juan Merchán ha trabajado como juez interino en la Corte Suprema del Estado desde 2009, presidiendo juicios penales por delitos graves. Le correspondió como juez, multar a la compañía de Trump con $1,6 millones de dólares, luego de ser condenada por 17 cargos.
El juez Merchán es reconocido en el medio judicial por ser una persona tranquila y llevar a cabo los procesos que dirige con mucha calma; sin embargo, es un juez “duro” y exigente, no tolera las interrupciones ni los retrasos en las audiencias y en la audiencia con Trump decidió que no se permitiría el uso de tabletas, cámaras, teléfonos o computadores. Le ha correspondido actuar en casos parecidos al de Stormy Daniels y Donald Trump. Uno fue el caso del exdirector financiero Allen Weisselberg. En ese proceso jurídico, Merchán, declaró que él habría impuesto una “sentencia más dura”, de los cinco años de cárcel que el exejecutivo obtuvo por un acuerdo con la Fiscalía.
Tanto Trump como su abogado Joe Tacopina, no creen en la imparcialidad del juez colombiano y no sería extraño que en el curso del juicio pidan un cambio. Hay que recordar que durante la administración de Trump se endurecieron las sanciones contra los inmigrantes latinos.
Es extraño que una persona con tantos problemas judiciales como Trump pueda aspirar a la presidencia. La ley de los Estados Unidos solo exige para ser mandatario ser estadounidense por nacimiento, tener al menos 35 años y haber vivido en Estados Unidos durante 14 años. Un convicto podría ser presidente.