Trompadas a los policías
Fueron muchas. Eso pasó este puente en Bogotá y en 118 municipios donde los borrachitos bailaron el Sanjuanero. A la Policía siempre la han agredido los hombres, pero que sean las mujeres, asombra.
Fueron muchas. Eso pasó este puente en Bogotá y en 118 municipios donde los borrachitos bailaron el Sanjuanero. A la Policía siempre la han agredido los hombres, pero que sean las mujeres, asombra. Preocupante, en Cali, hace 25 días, una bonita rubia, línea 30 años, de camioneta ‘chic’ arremetió a trompadas contra el policía de Tránsito que la pilló alicorada manejando por la Circunvalación. En redes y televisión vimos cuando la bonita rubia atacó a puños al guarda. Hubo final feliz: la camioneta a la grúa, muy merecida la doble multa y la muchachona alegre usará taxi cuando se embriague con porros y Gin-Tonics. Punto.
Mujeres y trompadas. El viernes en Bogotá hubo marcha de aficionados a la patineta y a la peligrosa tabla con rodachines. Exigían espacio para su ‘hobby’. Dichosos bloquearon la Carrera Séptima creando un caos brutal de tráfico. Hubo piedra y tabletazos a los policías. Un Agente en moto, sin culpa, arrolló en la avenida a un joven marchista y se armó la grande: al policía le dieron 27 puntapiés en la cara, cabeza y estómago los marchistas. Levantándose del suelo el agente enfrentó con su casco a una joven mujer que lo agredía con la tableta. Feo ataque del policía pero entiendan que él estaba en pánico, le habían dado una paliza brutal, estaba ‘grogui’. Lamentable pegarle a una mujer, pero la Policía merece respeto, es la ley. Punto.
Cuando las Farc asaltaron la Asamblea para secuestrar a los Diputados, entró matando y mató al subintendente Cendales. Con el agente Cendales han cometido un olvido imperdonable los actuales Diputados, la Asamblea y el Depto. Jueguen limpio: el subintendente Cendales perdió la vida allí, su familia padece problemones económicos y no son solidarios con ella. Los notablones del partido Farc les pidieron perdón pero la familia Cendales con el luto se quedó. Punto.
Miles rechazaron la grosería con el presidente Iván Duque en Londres. Ese tono violento de ‘asesino-asesino’ es idiota porque nadie sensato ve en Iván Duque un Somoza, Maduro o Ché Guevara matón. Hicieron un acto torpe, ese virus tóxico de ultra izquierda los enceguece. A un moderado decente como don Iván Duque jamás pueden llamarlo ‘asesino’. En el radial caleño Oye Cali me gustó que ayer el muy lúcido-sensato Fernando Garcés rechazara esos tontos ataques al presidente Duque. Punto.
Que sigan los ocios y fiestones en julio, ¡rumba es rumba!