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Ucrania
¿Estamos respondiendo al nuevo orden que Trump y Rusia están imponiendo? ¿Y el Secretario General no tiene nada que decir?
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Tres años de una confrontación militar asimétrica, Rusia contra Ucrania. Una violación absoluta del Derecho Internacional y de todos los principios que han inspirado la carta de las Naciones Unidas y el comportamiento entre las naciones. Una respuesta heroica del pueblo ucraniano. Y ahora una solución que se va construyendo, también, al margen de postulados que si se materializan abren un formidable espacio de incertidumbre en las relaciones entre los países.
Una monstruosa destrucción de una gran nación que era considerada como el granero del mundo por la cantidad de cereales que exportaba. Un número de muertos de lado y lado que no terminamos de establecer a ciencia cierta. Y un ejemplo desastroso de una guerra en un país europeo, continente que ha estado preservando la paz frente a los horrores de las dos guerras mundiales del Siglo XX, por medio de reglas, convenciones, instituciones y comportamientos hasta el momento infortunado de la invasión rusa.
El Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas habría podido prevenir esta guerra. No lo hizo. Y ahora podría contribuir a propiciar una paz justa preservando ante todo la integridad del territorio ucraniano. Dicen las informaciones que Estados Unidos promovió una resolución en el Consejo de Seguridad (15 miembros) en términos conciliatorios hacia Rusia, gracias a un bloque que los otros países, incluyendo los europeos que tienen derecho de veto, no pudieron superar. Diez votos a favor y cinco abstenciones. Una resolución muy breve de solo tres artículos, fue la primera sobre el tema porque Rusia vetó todas las anteriores durante tres años. Un triunfo de Estados Unidos.
Estados Unidos fue derrotado en la Asamblea General que votó dos resoluciones, una elaborada por Ucrania y la Unión Europea condenando la invasión rusa que fue aprobada por 93 votos a favor, 65 abstenciones y 18 votos negativos. Estados Unidos, Rusia, Corea del Norte y otros votaron negativamente. La segunda elaborada por Estados Unidos fue enmendada y votada favorablemente para ayudar a Ucrania.
Se considera que fueron dos derrotas diplomáticas a Estados Unidos. Las resoluciones de la Asamblea no tienen la fuerza coercitiva que sí tienen las del Consejo de Seguridad. Las Naciones Unidas, en sus dos principales órganos deliberativos, el principal bastión del orden internacional construido después de las dos guerras mundiales (1945) está experimentando algunas manifestaciones del nuevo orden internacional. En la Asamblea, Colombia se abstuvo. Recordemos que jamás condenó la invasión a Ucrania.
¿Estamos respondiendo al nuevo orden que Trump y Rusia están imponiendo? ¿Y el Secretario General no tiene nada que decir? Es que la preservación de los territorios de toda las naciones es un principio sagrado que fue violado con la invasión rusa y que, ahora, no puede condonarse con un premio al invasor.
Ah, ayer viernes, en una turbulenta reunión, las relaciones de Trump y Zelensky se rompieron, cuando debió quedar formalizado el acuerdo para que Ucrania le otorgara la explotación de sus tierras raras a Estados Unidos. Un trato que equivale a 530 billones de dólares, según los datos que se publican, y que corresponderían a la contribución de Estados Unidos para la defensa de Ucrania. Estos metales son estratégicos en la era digital y, según algunas versiones, se encuentran principalmente en zonas ocupadas por Rusia
¿Otra vez la ley del más fuerte?
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