La salud de los caleños
La ESE Oriente, que hasta hace tres años fue la empresa de salud pública más sólida y con mejores resultados en la ciudad, presentaría un déficit de $8000 millones al cerrar 2022 debido a malos manejos económicos, financieros y administrativos.
La evidencia más reciente de los problemas que atraviesan las Empresas Sociales del Estado, ESE, encargadas de prestar los servicios de salud en los sectores más necesitados de Cali, se vio durante la pelea protagonizada por el alcalde Jorge Iván Ospina y el gerente de la ESE Oriente, Óscar Ipia.
En medio de una Junta Directiva el mandatario le reclamó, a quién él mismo nombró en el cargo, por el riesgo en el que están los 26 centros de salud que maneja esa dependencia y que atienden a 230.000 caleños.
La ESE Oriente, que hasta hace tres años fue la empresa de salud pública más sólida y con mejores resultados en la ciudad, presentaría un déficit de $8000 millones al cerrar 2022 debido a malos manejos económicos, financieros y administrativos.
A la vez se habla de una preocupante concentración de los contratos de suministros y dotaciones, así como de intervención política en las decisiones que se toman en esa entidad.
Situación similar ocurre en el Hospital Geriátrico y Ancianato San Miguel, otra de las ESE de Cali, donde la Contraloría Municipal encontró un detrimento patrimonial de $3517 millones y la vulneración de los derechos de 300 adultos mayores que atiende la institución.
Ante esas denuncias, es necesario que el Alcalde le responda a la ciudad y se apliquen los correctivos necesarios para que estas Empresas Sociales del Estado recuperen la estabilidad perdida en estos años y respondan por la salud de los caleños como es su deber.