¿Chantaje?: Guillermo Jaramillo, minSalud, desató escándalo por supuesta entrega de ‘mermelada’ a los ‘verdes’ para aprobación de las reformas

El gobierno del presidente Gustavo Petro se encuentra inmerso en un nuevo escándalo, esta vez por las declaraciones del ministro de salud, Guillermo Jaramillo, el cual, al parecer, no calculó el calibre de sus declaraciones.

Jaramillo confesó que la Alianza Verde tenía participación burocrática en la Casa de Nariño con el Sena e Icetex y casi que presionó para que los congresistas apoyaran las reformas a cambio de sus supuestos ‘beneficios‘.

“Uno no puede tener, como sucede con algunas personas, representación en el Gobierno, representación importante en Bogotá a través del Sena, importante a través de institutos como el Icetex y hacer oposición. Este presidente es muy generoso porque les permite a los que están disfrutando del gobierno hacer toda la oposición, a pesar de que disfrutan de las posiciones en el alto Gobierno que se las hemos negado a nuestros propios militantes”, expresó Jaramillo.

Estas declaraciones generaron mucha polémica, tanto así que Luis Velasco, ministro del Interior, salió a ofrecer ‘perdón’ por dicha intervención.

“No salió bien la declaración de anoche. No es la posición del Gobierno nacional. Este ministro, a nombre del Gobierno, quiere decir a Colombia y a ustedes, señores representantes, que la relación con el Congreso, particularmente con el Partido Verde, nunca ha sido una relación transaccional”, aseguró Velasco en medio de la discusión de la reforma a la salud en la Cámara de Representantes.

Estas declaraciones podrían generar un nuevo escándalo de tinte judicial y ético. De hecho, Enrique Gómez, excandidato presidencial, entablará acciones penales contra el ministro y los congresistas de la Alianza Verde ante la Corte Suprema de Justicia y los directores del Sena e Icetex en la Fiscalía.

Gómez confesó en Semana que el delito es cohecho, también conocido como soborno. “Dar o recibir, el mismo que llevó a la cárcel a la ex parlamentaria Yidis Medina, quien fue condenada por recibir una notaría a cambio de votar positiva del expresidente Álvaro Uribe”.

Frente a esto, el presidente Gustavo Petro se pronunció en su cuenta de X, red social antes conocida como Twitter: “Un partido de gobierno cogobierna... Punto. Un partido de oposición hace oposición”.

El ‘chantaje’ del ministro de Salud

Las palabras del ministro de Salud, Jaramillo, fueron entendidas como un chantaje por parte de la opinión pública.

De hecho, la congresista Catherine Juvinao de la Alianza Verde afirmó: “Es realmente increíble ver a un ministro de gobierno chantajeando a un partido político sin ningún pudor, creyendo que una representación en el gobierno puede entenderse como moneda de cambio por votos para proyectos en el Congreso”.

El penalista Francisco Bernate, habló sobre el calibre de las palabras de Jaramillo en Semana.

“Estas declaraciones en sí mismas, no son constitutivas de un delito, pero lo que sí es importante es que pueden dar lugar a abrir una línea de investigación: el hecho de recibir beneficios burocráticos o cualquier tipo de prebenda a cambio de votar un proyecto de ley, ciertamente, se llama cohecho impropio en el que el funcionario público recibe cualquier beneficio a cambio de cumplir con su trabajo y el trabajo de los congresistas, es entre otras cosas, votar. Por eso se llama cohecho impropio y fue, precisamente, lo que ocurrió con la Yidispolítica”, expresó.

En ese sentido, Bernate, afirmó que vale la pena determinar si existen o no congresistas que están votando afirmativamente los proyectos a cambio de participación burocrática. “Eso es considerado- insisto- un delito llamado cohecho impropio”.

“Si el caso es que haya funcionarios que están recomendando hojas de vida, pero ello no condiciona su actuar como parlamentarios, es una práctica indebida, si se quiere antiética, pero no es un delito”, finalizó Bernate en Semana.