Coyuntura
Como la ‘cosa nostra’: la periodista María Isabel Rueda compara el Gobierno Petro con la mafia italiana
En su más reciente columna de opinión, la prestigiosa periodista analiza el ‘Nannygate’ del Gobierno Petro y lo describe como una organización mafiosa.
Según la periodista María Isabel Rueda, en su columna de este domingo en El Tiempo, titulada “Nuestra ‘cosa nostra’”, y referido al actual escándalo del ‘Nannygate’ del Gobierno Petro, este hecho guarda sorprendentes similitudes con otros casos de corrupción y presenta características propias de la mafia. La autora destaca: “Desde el comienzo, este ‘Nannygate’, o escándalo de la niñera Marelbys Meza, comenzó a tener un notable parecido no solo con el proceso 8.000, que juiciosamente han comparado ya varios medios de comunicación, sino con los procedimientos de la mafia”.
Rueda señala que tanto el proceso 8.000 como el ‘Nannygate’ iniciaron con grabaciones ilegales, y en ambos casos, la veracidad de las grabaciones se ha ido confirmando con el tiempo: “Ambos escándalos arrancan con grabaciones ilegales. Y así como las del 8.000 terminaron corroborándose a través de testigos, sobre estas también se ha venido confirmando su veracidad”.
Con ‘Nannygate’ la periodista se refiere al escándalo de las chuzadas ilegales realizadas a las empleadas de la exjefe de gabinete del Gobierno Petro, Laura Sarabia, y que tienen en medio de una tormenta política y mediática al actual presidente.
La autora hace referencia a las similitudes entre los protagonistas de ambos casos. En el proceso 8.000, Santiago Medina, tesorero de la campaña del expresidente Samper, inicialmente negó todo, pero más tarde decidió contar la verdad al darse cuenta de que su abogado no estaba defendiendo sus intereses: “El ministro Serpa, preocupado, le consiguió un abogado de toda su confianza, Ernesto Amézquita. Con ese respaldo, Medina comenzó negándolo todo. Cuando entendió que los intereses de Amézquita no eran los suyos sino los del Gobierno, decidió cambiarlo y toda la verdad se supo”.
En el caso del ‘Nannygate’, Rueda compara al recientemente fallecido coronel Óscar Dávila con Santiago Medina, señalando que ambos sospecharon que sus abogados estaban más interesados en proteger al Gobierno que en velar por sus intereses personales: “El ‘Medina’ de esta segunda historia, en quien recaería toda la culpa, viene a ser el fallecido coronel Óscar Dávila. Su jefe inmediato, el coronel Carlos Feria, jefe de la Casa Militar de Palacio y muy de confianza de Petro, no solo le levantó 100 millones de pesos a Dávila para que contratara a un abogado, sino que llegó a señalarle exactamente a cuál: al ‘abogado del régimen’”.
Cabe señalar que en diferentes ocasiones la columnista se refiere a un ‘abogado del régimen’, a quien no identifica, pero podría tratarse del penalista Miguel Ángel del Río, quien tiene afinidad con Gustavo Petro y el Gobierno actual, y que además es uno de los juristas que representa a una de las víctimas en el caso penal por manipulación de testigos que se lleva contra el expresidente Álvaro Uribe Vélez. En este sentido, vale la pena recordar que a pesar de su encomiable labor periodística, María Isabel Rueda se ha caracterizado por su simpatía ideológica con Uribe Vélez y la oposición del Gobierno Petro.
Por otro lado, en su columna, la autora plantea preguntas intrigantes, suponiendo una debilidad moral y económica, sobre la situación de Laura Sarabia, comparándola con Fernando Botero en el caso del proceso 8.000 y cuestionando si Sarabia estará dispuesta a hablar para evitar la cárcel y poder criar a su hijo: “¿Estará Laura Sarabia dispuesta a hablar para poder criar a su hijo de un año (‘recién parido’, dice Petro) en lugar de terminar presa varios años por delitos como enriquecimiento ilícito, abuso de autoridad y concierto para delinquir?”.
Rueda menciona que tanto Laura Sarabia como el coronel Feria, jefe del esquema de seguridad del presidente, parecen confiar en el presidente Petro para protegerlos: “A Laura le pasa, por ahora, lo que al jefe de Casa Militar, el coronel Feria: adoran a Petro y creen que él los salvará. Lo mismo creyó Santiago Medina del equipo de Samper. Por lo tanto, es muy pronto para saber si ambos contarán la verdad”.
En cuanto a la acusación de que los dineros robados pertenecen al presidente Petro, la autora resalta la importancia de que la Fiscalía investigue y verifique esta información: “Por último, merece análisis lo revelado a ‘Semana’ por un testigo anónimo, con la grave acusación de que la plata que circuló y se robaron de donde Laura Sarabia eran 3.000 millones y que pertenecían a Gustavo Petro. [...] ahora es menester que la Fiscalía contraste esta volcánica información”.
María Isabel Rueda concluye su columna planteando preocupaciones sobre la gobernabilidad y sugiriendo la posibilidad de que “en este gobierno se mueven fuerzas tan siniestras que, francamente, ya casi nos permiten hablar de nuestra propia ‘cosa nostra’: ¿nos estará gobernando un régimen que utiliza procedimientos propios de las mafias?”.