Artritis: hierbas medicinales que ayudan a aliviar los síntomas

La artritis es una enfermedad que afecta a millones de personas en todo el mundo y se caracteriza por la inflamación de las articulaciones, lo que provoca dolor, rigidez y dificultad para moverse.

Aunque se asocia comúnmente con el envejecimiento, la artritis puede afectar a personas de todas las edades, incluidos niños y jóvenes adultos.

Existen diferentes tipos de artritis, pero los dos más comunes son la osteoartritis y la artritis reumatoide. La primera es causada por el desgaste y deterioro del cartílago que protege las articulaciones. A medida que el cartílago se desgasta, los huesos pueden rozar entre sí, causando dolor e inflamación.

Por su parte, la artritis reumatoide es una enfermedad autoinmune en la que el sistema inmunológico ataca erróneamente las articulaciones, provocando una inflamación crónica.

Aunque la causa exacta de la artritis no se conoce con certeza, se cree que una combinación de factores genéticos, ambientales y de estilo de vida desempeñan un papel importante en su aparición y posterior desarrollo. Algunos factores de riesgo incluyen la edad avanzada, lesiones articulares previas, obesidad y ciertas infecciones.

En cuanto a su tratamiento, los esfuerzos se centran en aliviar el dolor, reducir la inflamación y mejorar la función articular. Si bien profesionales de la salud normalmente recetan medicamentos antiinflamatorios no esteroides como el ibuprofeno, existen otras soluciones naturales que pueden practicarse desde casa y en muchas ocasiones de forma más económica.

Muchas hierbas poseen propiedades antiinflamatorias y analgésicas que pueden aportar a los procesos de tratamiento. Algunas de ellas son:

1. Eucalipto: el aceite de esta planta obtenido de sus hojas se ha utilizado popularmente como remedio tópico para aliviar los síntomas de dolores musculares y articulares, incluida la artritis. Esto se debe a que contiene compuestos químicos, como el eucaliptol, que poseen propiedades analgésicas y antiinflamatorias.

Cuando se aplica tópicamente, el aceite de eucalipto produce una sensación de frescura y puede proporcionar un alivio temporal del dolor y la inflamación en las articulaciones afectadas por la artritis. Sin embargo, es importante tener en cuenta que este alivio suele ser transitorio y puede variar en cada individuo.

2. Aloe vera: existen algunas evidencias anecdóticas y estudios preliminares que sugieren que el aloe vera puede tener beneficios en el alivio de los síntomas de esta enfermedad. El gel de aloe vera, que se extrae de las hojas de la planta, contiene una variedad de compuestos activos, incluyendo vitaminas, minerales, enzimas y sustancias antiinflamatorias.

Se cree que estos componentes pueden ayudar a reducir la inflamación y aliviar el dolor asociado con la artritis. Al aplicar el gel de aloe vera de manera tópica sobre las áreas afectadas, se puede reducir la inflamación y proporcionar alivio temporal del dolor y la rigidez.

3. Jengibre: estudios sugieren que los compuestos activos del jengibre, como los gingeroles y los shogaoles, pueden inhibir la producción de sustancias inflamatorias en el cuerpo, lo que podría reducir la inflamación y el dolor articular.

En estudios clínicos, se ha observado que el consumo de jengibre, ya sea en forma de suplemento o como parte de la dieta, puede tener efectos beneficiosos en los síntomas de la artritis. Sus resultados han reportado una reducción del dolor, la inflamación y la rigidez en las articulaciones en personas que consumieron jengibre de manera regular. Además, se ha observado que el jengibre puede tener menos efectos secundarios en comparación con algunos medicamentos antiinflamatorios no esteroides.

4. Cúrcuma: el ingrediente activo principal de la cúrcuma es la curcumina, que ha demostrado tener propiedades antiinflamatorias potentes en estudios de laboratorio y en modelos animales. La curcumina puede inhibir las vías inflamatorias y reducir la producción de sustancias inflamatorias en el cuerpo, lo que puede ayudar a disminuir la inflamación en las articulaciones afectadas por la artritis.

Varios estudios han investigado los efectos de la curcumina en la artritis, incluyendo la osteoartritis y la artritis reumatoide. Estos han encontrado que la curcumina puede reducir el dolor, la inflamación y la rigidez en las articulaciones, y mejorar la función articular en personas con artritis.

5. Té verde: por sus propiedades antiinflamatorias y analgésicas, que podrían ser beneficiosas en el tratamiento de la enfermedad, el té verde también puede ser una alternativa para el tratamiento de la artritis.

Los estudios han demostrado que los componentes del té verde, como la epigalocatequina-3-galato (EGCG), pueden inhibir las vías inflamatorias y reducir la producción de sustancias inflamatorias en el cuerpo. Esto puede ayudar a reducir la inflamación en las articulaciones y aliviar los síntomas asociados con la artritis.

Además de su efecto antiinflamatorio, el té verde también se ha relacionado con la protección del cartílago articular. Algunos estudios han sugerido que los antioxidantes presentes en el té verde pueden ayudar a prevenir la degradación del cartílago y promover su salud.