¿Cómo usar el aloe vera para producir colágeno natural y reducir arrugas?

El colágeno es el responsable de que la piel se mantenga firme y elástica. El problema es que, a partir de los 25 años, la producción de colágeno disminuye, y eso se refleja en la disminución del brillo y de la hidratación natural de la piel. Se calcula que las mujeres deben empezar a tomar suplementos a base de colágeno a partir de los 30-35 años, mientras que los hombres deberían incorporarlo a partir de los 45, ya que tienen una piel más gruesa y con una mayor densidad de colágeno.

En ese sentido, el aloe vera es reconocido por sus propiedades calmantes y cicatrizantes. Contiene compuestos antiinflamatorios que pueden aliviar la irritación de la piel y promover la curación de heridas. También es un humectante natural que ayuda a mantener la piel hidratada.

Así las cosas, hay tres formas para utilizar el aloe vera para que dicho beneficio pueda ser más que aprovechado. La aplicación directa o la mezcla con otras sustancias podría ayudar.

La primera sugerencia se basa en dormir con aloe vera aplicado en el rostro. De esta forma, la piel tendrá una cuenta extra de vitaminas y minerales, las cuales pueden actuar mejor cuando descansa. A fin de ese propósito, se debe usar ese gel natural que está en su interior para eso. A la mañana siguiente, lavará la cara con agua, como de costumbre.

Asimismo, el segundo método de uso ofrece un sello de protección en la piel, teniendo un efecto similar al del bótox. Para ello, el gel del aloe vera debe congelarse, puede colocarlo en una hielera o una bolsa de hielo y, cuando esté listo, hará masajes circulares con ello en todo el rostro.

Finalmente, la alternativa se dispone como agua de aloe vera. Es una de las mejores opciones para lavar la cara cada mañana. Esto sirve para desinflamar, producir más colágeno y evitar las manchas que aparecen por exceso de contacto con el sol u otros factores. Se prepara dejando una hoja (penca) de esta planta en agua durante toda la noche, lo que hace que se suelten todas las propiedades y se disuelvan en el líquido. Tal solución puede usarse diariamente, si se quiere.

De igual manera, la combinación de aceite de coco y aloe vera puede ser beneficiosa para la piel de varias maneras. Puedes usarlos juntos como parte de tu rutina de cuidado de la piel de la siguiente manera:

• Hidratante facial: Mezcla una cucharada de aceite de coco con gel de aloe vera fresco o gel de aloe vera puro. Aplica esta mezcla en tu rostro como hidratante después de limpiarlo. El aceite de coco proporcionará hidratación profunda, mientras que el aloe vera calmará la piel y promoverá la regeneración celular.
• Tratamiento para el acné: Mezcla una cucharada de aceite de coco con una cucharadita de gel de aloe vera y unas gotas de aceite de árbol de té. Aplica esta mezcla sobre las áreas afectadas por el acné y déjala actuar durante unos 15-20 minutos antes de enjuagar. El aceite de coco y el aloe vera ayudarán a reducir la inflamación y combatir las bacterias causantes del acné.
• Tratamiento para quemaduras solares: Mezcla partes iguales de aceite de coco y gel de aloe vera y aplícalo suavemente sobre la piel afectada por las quemaduras solares. La combinación de estos ingredientes ayudará a aliviar la sensación de ardor, hidratar la piel y promover la curación.

Es importante tener en cuenta que cada piel es única, y lo que funciona para una persona puede no funcionar de la misma manera para otra. Siempre realiza una prueba en una pequeña área de tu piel antes de aplicar cualquier mezcla en todo el rostro o cuerpo para asegurarte de que no tengas ninguna reacción adversa. Si experimentas alguna irritación o molestia, suspende su uso y consulta a un dermatólogo.