¿Cuáles son los primeros síntomas del Párkinson?

El Parkinson, una enfermedad neurodegenerativa que afecta principalmente el sistema nervioso del cuerpo humano, es uno de los padecimientos que más afecta a los adultos mayores en el mundo. Sin embargo, sus síntomas iniciales pueden variar de una persona a otra. Estos a menudo, son sutiles y pueden pasar desapercibidos o confundirse con otros problemas de salud.

Lo cierto es, que son varias las señales que pueden revelarle a una persona que efectivamente se trata de esta condición, que da indicios de manera muy lenta de un deterioro motor y cognitivo.

Uno de ellos es el temblor, uno de los síntomas más conocidos del Parkinson, pues generalmente comienza en una mano o un dedo. Este tiende a ser en reposo, es decir, se manifiesta cuando la persona está en reposo, y disminuye o desaparece durante el movimiento.

Luego aparecen los movimientos lentos, mejor conocidos como la bradicinesia, donde las personas con Parkinson pueden experimentar dificultad para iniciar movimientos, además de presentar una disminución en la expresión facial.

Tras este atisbo de la enfermedad, los pacientes con esta condición pueden sufrir de rigidez muscular, lo que puede hacer que los músculos se sientan tensos, causando molestias en su desplazamiento y limitando su andar. No obstante, el Parkinson también puede desarrollar en una persona, una postura encorvada y una marcha arrastrante con pasos más cortos.

Cabe decir que, el Parkinson es el segundo trastorno degenerativo del sistema nervioso central más común, después de la enfermedad de Alzheimer, por lo que afecta a 1 de cada 250 personas mayores de 40 años.

Ahora bien, no solo hay cambios en el movimiento, pues padecer la enfermedad también deja ver cambios en la escritura, siendo más pequeña y difícil de leer; y en la voz, sonando más suave o temblorosa.

Otra de los cambios que sufre una persona con esta condición, es experimentar una disminución en su sentido del olfato, incluso antes de que aparezcan otros síntomas motores. Además, puede llegar a tener problemas con el sueño, como sufrir de insomnio, sueño fragmentado o movimiento excesivo durante este momento del descanso (llamado trastorno del comportamiento del sueño REM).

Otro de los síntomas de alarma temprana, puede ser presentar estreñimiento crónico, o cambios en el estado de ánimo y la cognición: como tener depresión, ansiedad o problemas cognitivos leves, aunque estos síntomas suelen ser más prominentes en las etapas posteriores.

Sobre el Parkinson

Aunque a ciencia cierta, no hay una razón del por qué se da esta enfermedad, una de las causas a las que se le atribuye principalmente es a una pérdida de las neuronas que producen dopamina, un tipo de neurotransmisor del cerebro. Cuando estas se degradan o mueren, provocan actividad irregular lo que deriva en diversos problemas físicos como perdida del movimiento, y daño cognitivo.

Diversos especialistas afirman que la enfermedad suele comenzar entre los 50 y los 79 años de edad, siendo los hombres mucho más vulnerables que las mujeres a padecerla.

No obstante, aunque es una enfermedad degenerativa y que avanza muy lentamente, el Parkinson no tiene cura, por lo que es muy difícil prevenirla. Sin embargo, en algunas investigaciones se demostró que el ejercicio podría reducir el riesgo de tener la enfermedad de Parkinson, así como el consumo de cafeína.

Un dato relevante de esta enfermedad es que es muy poco habitual que afecte a niños u adolescentes.