El efectivo batido para ‘barrer’ con la acidez del estómago y mejorar la digestión

Los jugos naturales no solo sirven para refrescarse, sino que también aportan nutrientes que pueden cambiar y mejorar el organismo.

Por ejemplo, quienes tienen problema digestivos como la gastritis y la acidez estomacal, deben consumir el jugo de papa.

Y es que la papa es un alimento esencial en la medicina natural, debido a que posee propiedades antiinflamatorias y termina siendo un remedio repleto de hierro, vitaminas, potasio, fósforo y antioxidantes.

Los especialistas han determinado que una de las maneras en las que más se pueden aprovechar los beneficios de la papa es mediante su jugo.

La medicina tradicional le atribuye inclusive propiedades antiinflamatorias que pueden ayudar a aliviar problemas digestivos como la gastritis.

El jugo de papa, según lo detalla El Cronista, puede aliviar los problemas digestivos gracias a sus propiedades antiinflamatorias y alcalinizantes.

Además le aporta salud a la piel, sobre todo porque calma irritaciones y quemaduras leves gracias a sus propiedades calmantes.

Por sus propiedades antiinflamatorias es capaz de reducir inflamaciones internas y externas, además de mejorar el sistema inmunológico por su contenido de vitamina C, lo que a su vez fortalece las defensas del cuerpo.

Para prepararlo

Para preparar el jugo de papa, de forma fácil y rápida, debe elegir las papas, preferiblemente orgánicas para evitar que tengan pesticidas.

Lavelas bien, con abundante agua para eliminar la tierra y las impurezas, luego debe pelarlas y cotarlas en trozos pequeños para facilitar el licuado.

Dichos trozos de papa debe colocarlos en una licuadora y añadir un poco de agua para ayudar en el proceso. Licue hasta obtener una mezcla homogénea, luego vierta la mezcla en un colador fino para separar el jugo de la pulpa.

Luego de extraer todo el líquido posible, beba el zumo para aprovechar al máximo sus nutrientes.

Tenga presente que la acidez estomacal puede ser causada por ciertos alimentos, por el alcohol o por algunos medicamentos. Los síntomas se reflejan a través de un ardor en el pecho o un sabor amargo o ácido en la boca.