Salud
Las consecuencias de no lavar el cabello durante una semana
La frecuencia del lavado de cabello es muy importante para la salud capilar, por ello, se deben seguir algunas recomendaciones.
Aunque el cabello parezca limpio, debe lavarse con frecuencia. Existe un debate sobre la cantidad de veces por semana que la pelo debe higienizarse, sin embargo, los expertos concluyen que esto varía de acuerdo a el tipo de cabello y las actividades de cada persona.
Además, siempre y cuando se utilice un champú y acondicionador adecuados, el cabello se puede lavar frecuentemente y sin ningún problema. A pesar de lo anterior, también se debe considerar que cuando el cabello es muy seco, puede pasar hasta 10 días sin lavado.
La estilista Rosi Fernández, directora de Ananda Ferdi, afirma que “no es recomendable aguantar más de una semana sin lavar el cabello, ya que el folículo se obstruye y no se oxigena”.
Así las cosas, la experta recomienda lavar el cabello mínimo dos veces a la semana para retirar los residuos acumulados, pero es claro mencionar que cada cabello es diferente, por lo que también se debe tener en cuenta este factor a la hora de decidirlo.
Tener un cabello luminoso, suave e hidratado es uno de los propósitos estéticos más importante para las personas, pues este no solo refleja su aspecto físico, sino también el estado de salud de las personas.
De este modo, es importante cuidarlo desde distintos aspectos como la higiene, la alimentación, el uso productos naturales, entre otros, para que crezca con fuerza y vitalidad.
Entonces ¿cada cuanto debe lavarse?
“Según la experta, cuando se lava el cabello menos de dos veces a la semana, el folículo se obstruye y eso puede originar ciertos problemas: descamación de cuero cabelludo, picores, sensibilidad, caspa y hasta caída. Esas pequeñas partículas invisibles a la vista, pero que acaban posándose en el cuero cabelludo, impiden que se oxigene bien, de ahí que sea recomendable lavar el pelo más a menudo, incluso en cabellos gruesos y secos que aparentemente no sienten la necesidad ser lavados de forma tan frecuente” dice Fernádez.
Ahora bien, frente a cada tipo de cabello, la periodista Lindsey Ellfson revela en un artículo publicado para ‘Life Hacker’ que los cabellos rizados o rubios pueden ser lavados con más frecuencia con el fin de evitar resequedad en sus puntas, ya que son los cabellos que pueden padecer con frecuencia falta de humedad.
Del mismo modo, cuando los cabellos son gruesos, más deberá evitar pasarlo por la ducha. Por ejemplo, si el cabello está decolorado o teñido, los elementos químicos del champú podrían hacer que se reseque y debilite el tono de color. Para este caso, “es posible que debas aumentar la frecuencia de lavado”, según detalla Krista McKinnon, peluquera estadounidense consultada por Ellefson.
En cuanto a los cabellos más delgados y finos, esto son más propensos a llenarse de grasa con más facilidad que los gruesos. Por ello, Jet Rhys, estilista norteamericano, señala que lo mejor es lavarlo cada dos días, con un champú suave, sin sulfatos para no eliminar los aceites naturales del pelo.
“El exceso de champú puede secar el cuero cabelludo, por lo que acaba produciendo más aceite, creando un círculo vicioso que nunca termina”, asegura en un artículo de la revista ‘Better Home & Gardens’.
Cabello sucio
Cuando el cabello no se lava con frecuencia se produce una mayor sequedad y pérdida de luminosidad del mismo ya que las cutículas se abren.
El polvo y otras partículas que contaminan el cabello pueden alterarlo provocando incluso la caída y ruptura del mismo.
Además, en el caso de condiciones como psoriasis o dermatitis seborreica se produce un exceso de grasa en el cuero cabelludo y la situación se agrava si no hay una correcta higiene capilar, explica Aurora Garre, Medical Marketing Manager de ISDIN
Además, la suciedad sobre el cabello produce una disminución del brillo y del movimiento. La importancia del lavado radica en que al aplicar champú y agua los detergentes movilizan la suciedad y la grasa acumulada para que se eliminen del cuero cabelludo y del pelo, explica la dermatóloga.