Los cinco peores hábitos que afectan la espalda

En ocasiones, las lesiones en la espalda no solo son provocadas por accidentes o enfermedades de base, sino que se originan por la práctica constante de determinadas acciones que generan dolores intensos e incluso puede causar daños irremediables en la salud de su espalda.

Aunque estas parezcan actividades cotidianas, algunos expertos explican que se trata de comportamientos nocivos para la espalda, que podrían aumentar la probabilidad de sufrir una lesión.

Estas prácticas puede generarle daños a su espalda

1. Estar demasiado tiempo sentada y encorvada

El sedentarismo puede ocasionar problemas al cuerpo, pues al estar sentado por mucho tiempo se ejerce bastante presión sobre los músculos de la espalda.

Por eso, “si te mantienes en la misma postura todo el día, te puede causar mucho dolor“, explica Rebecca Pudvah, especialista en ortopedia de Athletico Physical Therapy.

De ahí que se recomiende realizar actividad física, ya que actúa como un antiinflamatorio y ayuda a controlar los niveles de dolor. También, se recomienda que en su jornada laboral incluya un paseo rápido o estiramientos de aproximadamente 30 segundos para relajar el cuerpo.

Estas son algunas recomendaciones adicionales: cuando esté sentado, procure mantener una buena postura: relaje los hombros; enderece la columna vertebral, en el que la cabeza forme una línea recta directamente encima de las caderas y evita encorvarse más allá de lo natural.

2. Dormir de forma incorrecta

Expertos aseguran que una de las maneras más dañinas para la espalda es la posición fetal, de este modo se redondea excesivamente, generando que la espalda se estire.

Por eso, se recomienda poner una almohada entre las rodillas para evitar girar cuando esté recostado de lado. Y si usted prefiere dormir boca arriba, se sugiere deslizar una almohada bajo las rodillas para mantenerse estable.

3. Saltarse el calentamiento

Si bien, el ejercicio es saludable para el organismo y las articulaciones, puede ser también perjudicial si antes de hacer ejercicio no calienta el cuerpo.

Por ejemplo, si usted pasa toda la semana sentado y el sábado por la mañana realiza alguna actividad que le implique un esfuerzo físico, bien sea deportiva o simplemente en el hogar, es posible que los músculos de la espalda no sean capaces de soportarlo.

4. Levantar algo demasiado rápido

Al levantar peso es importante incluso considerar la forma en que se va a levantar, aunque sea ligeramente mal, puede acarrear problemas. Esto incluye el bend-and-twist, o sea, agarrar un objeto del suelo y luego girar rápidamente a un lado en el ascenso.

“En esa posición, todas las estructuras de la espalda se alargan hasta el punto de que no son lo bastante fuertes para soportar la carga […] Pones más tensión en los tejidos de la que pueden tolerar, lo que puede provocar daños en los músculos, inflamación y dolor”, dice Westervelt.

La forma ideal es mantener el torso recto y doblar las rodillas para agacharse. Una vez tome el objeto, manteniéndolo cerca del cuerpo mientras endereza las piernas, resiste el impulso de retorcerte y limítate a usar los pies para moverte hacia donde necesites.

5. Preocuparse por cosas que no puede controlar

El estrés no solo afecta a la salud mental, sino que también es uno de los hábitos dañinos para tu espalda. Si está muy cansado, sus músculos no están preparados para trabajar, así que se encontrará en una posición encorvada que puede provocar dolor de espalda.

La tensión puede estar causando daños físicos, por eso, haga todo lo posible por calmar tu día a día. “Busca vías que te ayuden a aliviar el estrés, ya sea meditar, hacer ejercicio o tomar aire”, sugiere Pudvah. Si te resulta difícil, recuerda dos cosas: la relajación, como todo, requiere práctica, y puede que necesites experimentar con lo que mejor te funciona. Y busca ayuda terapéutica si es necesario.