Los increíbles beneficios para el cuerpo de tomar té

El té es una de las bebidas más consumidas del mundo, y según la Organización de las Naciones Unidas, su elaboración aporta en gran medida el sustento de millones de familias de países en desarrollo.

Además, consumir el consumo de té aporta grandes beneficios a la salud y el bienestar del cuerpo. En algunos lugares del mundo esta bebida también hace parte de la cultura.

¿Cómo preparar un buen té?

Los expertos de The Tea House, quienes se encuentran en Colombia desde 1990 con la idea de impulsar la cultura del té, afirman que “tomar una buena taza de té es ideal en cualquier momento del día, ya que se convierte en un momento de paz que le da a su cuerpo y su mente: un estímulo en la mañana, una recarga de energía durante la tarde y un descanso en la noche”.

Además, se debe tener en cuenta que esta bebida tiene diversas preparaciones de acuerdo a la planta o alimento que se utilice para la infusión. Las más conocidas son las de té negro, verde o rojo y también las de plantas medicinales como la manzanilla, el tomillo o el romero.

El primer paso para preparar un buen té es elegir un té de calidad, ya que de esta manera se puede disfrutar de muchos beneficios en la salud y de un agradable sabor. Cuando se elige un té de mala calidad se va a sentir un sabor amargo y poco agradable.

Una manera de saber si un té es de buena calidad es cuando las hojas se mojan, ya que, luego de este proceso las hojas absorben el agua y se ven completamente frescas.

Además, al comprar las hojas se puede preguntar sobre el proceso de recolección, ya que los tés recolectados manualmente y sin máquinas ni contaminación son los más recomendados.

Por otra parte, cuando la infusión es clara, brillante y fresca se puede saber que es de buena calidad, mientras que un té de baja calidad puede parecer opaco.

Los tés en bolsas individuales pueden ser de alta calidad al igual que los de granel y se pueden encontrar de muchos sabores, colores y olores.

El segundo paso es tener cuidado con la temperatura del agua, al contrario de lo que se piensa, cuando se prepara té el agua no debe hervir porque cuando se llega al su punto de ebullición pierde el oxígeno necesario disfrutar de una mejor fragancia y sabor, además también pueden quemar las hojas de té.

Para que la preparación sea ideal se debe calentar el agua a unos 75 grados Celsius, como generalmente no se tiene en casa un instrumento para medir la temperatura del agua en la cocina, una buena técnica es quitar el agua del fuego es cuando salen pequeñas burbujas en la parte baja de la olla.

Por último, hay que tener en cuenta el tiempo de infusión ya que cada tipo de te tiene un tiempo ideal que se debe respetar para que el té quede bien:

• Té verde, té blanco y té amarillo: dos a tres minutos.
• Té negro, té azul y Pu-erh: cuatro a seis minutos.
• Infusiones de frutas y mezclas de hierbas: seis a 10 minutos.

Lo mejor es tomar té en horas de la mañana o al medio día, sin embargo, en algunas culturas la tarde es la hora ideal para beberlo.

En la noche se debe tener cuidado, pues por su aporte de cafeína puede que no ayude a conciliar el sueño, según el organismo de cada persona.

“Tratemos de no creer todo lo que vemos en redes sociales sobre esas propiedades milagrosas del té, no existe como tal un único camino hacia la prevención de enfermedades o pérdida de peso, para lograr este último se debe seguir una dieta saludable, actividad física y este tipo de productos como el té lo que hacen es apoyarnos para llegar a esa meta”, afirma la nutricionista Daniela Ovalle.