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¿Qué beneficios tiene el orégano seco y cómo prepararlo?
Es utilizado en el mundo culinario y en el medicinal. Lo recomendable es consumirlo dos veces al día.
El orégano es una planta aromática que se usa dentro de la gastronomía y dentro de la medicina, debido a sus múltiples beneficios.
Sus hojas ovaladas y de color verde oscuro desprenden un olor intenso. En la cocina se utilizan sus hojas como especia para sazonar carnes, pescados, aves, salsas, ensaladas, pastas, pizzas y caldos.
En México, por ejemplo, es un ingrediente esencial en la aromatización del pozole, uno de los platillos más tradicionales.
Para la Secretaría de Agricultura y Desarrollo Rural de México, sus propiedades medicinales destacan su alto contenido en minerales y ácidos, los cuales ayudan a disminuir dolores de cabeza, estómago, garganta, articulaciones y muelas.
Contribuyendo también a prevenir problemas cardíacos, digestivos y de estreñimiento, aliviando además la tos, el asma y los resfriados.
Es fuente de vitaminas A, C, E y K, además de ser rico en fibra y minerales como el hierro, magnesio y potasio.
“También se destaca por tener un gran potencial económico y una importante demanda internacional, gracias a sus usos en la industria farmacéutica y cosmética. En México la producción de orégano rebasa las 80 toneladas. De este modo, todas sus ventajas y utilidades lo convierten en uno de los productos de mayor aprovechamiento mundial”, indicó el Gobierno a través de su página web.
Propiedades al prepararlo en infusión
Aunque el orégano se utiliza para condimentar las comidas, otro uso que se le puede dar es prepararlo en infusión.
El té de orégano, que se preparar con la planta fresca o con sus hojas secas, es fuente de fotoquímicos, a los cuales se le atribuyen numerosos efectos positivos para el organismo en general.
También contiene ácido fólico y calcio, al igual que aceites esenciales como el timol, origaneno o carvacrol.
Por todo ello se le atribuyen numerosas propiedades, al que se le considera una especia, planta aromática y, un alimento bastante completo.
Entre las propiedades del orégano seco están:
Digestivas:
Por medio del té de orégano se pueden reducir las molestias estomacales que se producen tras las comidas como la acidez o el reflujo. Esta infusión le ayudará a evitar el estreñimiento.
Cicatrizante:
El té facilita que las heridas cicatricen antes, reduciendo a su vez las posibilidades de que se infecten.
Circulación sanguínea:
Favorece la circulación, evitando la aparición de trombos y regulando la menstruación. ya que reduce la inflamación del útero o matriz que se produce cuando la mujer está en esos días.
Diurético:
El té de orégano tiene propiedades diuréticas, ya que es un complemento para perder peso.
Antiinflamatorio:
El orégano reduce la inflamación por contener betacariofilina. Por ello se recomienda su consumo en caso de osteoporosis y arteriosclerosis.
Relajante:
Esta infusión tiene un efecto relajante, por lo que ayuda a conciliar el sueño, a controlar los estados de ansiedad, el estrés o el nerviosismo en general.
Para preparar el té
El proceso es muy similar al de una tisana normal. Para ello solo requiere de agua y un poco de orégano seco.
Cabe señalar que la cantidad de cada ingrediente dependerá de la cantidad final que quiera tomar.
Para su preparación debe poner el agua a hervir con la cantidad que vaya a tomar en ese momento. Cuando este en ebullición debe añadir las hojas de orégano, las cuales deberá dejar hervir por tres minutos.
Al retirar del fuego deje reposar la infusión por mínimo cinco minutos. Si desea la bebida más concentrada, puede esperar hasta diez minutos. Luego de colarla, puede beberla de inmediato.
Recuerde que hace mucha cantidad de bebida y la guarda, esta podría perder sus propiedades, por ello lo recomendable es prepararla y consumirla en el momento.
El té de orégano puede ser consumido varias veces al día. Lo indicado es tomar una taza en la mañana y otra en la noche.
Si lo toma en exceso
Tenga cuidado, ya que al consumirlo en gran cantidad puede presentar vómitos, malestar en el estómago, dolor de cabeza, vértigo, fatiga, dificultad para tragar, salivación en exceso y dolor muscular.