Qué tan bueno es consumir café verde para adelgazar; estos son sus riesgos y beneficios

Bajar de peso se ha convertido en un claro objetivo para millones de personas alrededor del mundo. Si bien ha quienes persiguen este propósito por motivos estéticos, para poder colocarse ciertas prendas de ropa o para sentirse más cómodos con su cuerpo, en realidad hay razones relacionadas con la salud física detrás de ello.

El sobrepeso puede llegar a ser fatal, pues afecta a varios órganos y sistemas. La Organización Mundial de la Salud lo explica de la siguiente manera. “El sobrepeso y la obesidad se definen como una acumulación anormal o excesiva de grasa que puede ser perjudicial para la salud. El índice de masa corporal (IMC) es un indicador simple de la relación entre el peso y la talla que se utiliza frecuentemente para identificar el sobrepeso y la obesidad en los adultos. Se calcula dividiendo el peso de una persona en kilos por el cuadrado de su talla en metros (kg/m2)”, indica la entidad.

Además, el organismo internacional advierte sobre la alta peligrosidad de tal condición. “A nivel mundial, el sobrepeso y la obesidad están vinculados con un mayor número de muertes que la insuficiencia ponderal. En general, hay más personas obesas que con peso inferior al normal. Ello ocurre en todas las regiones, excepto en partes de África subsahariana y Asia”, agrega la OMS en su portal oficial.

Es por esto que muchos han recurrido a suplementos farmacológicos o arduas rutinas de ejercicio para lograr adelgazar. No obstante, médicos y especialistas en estado físico reafirman la importancia que tienen los productos naturales en la consecución de tal meta.

Por esto, la alimentación saludable y la dieta balanceada aparecen como grandes claves para mantener regulado el peso. Asimismo, lo que no se consume también juega un papel importante.

Una de las sustancias más comunes en las recomendaciones para perder algunos kilos es el café verde, el cual no es más que los granos sin tostar del fruto de la Coffea arábica o Coffea canephora. Este, a su vez, se considera más efectivo que el tostado, ya que contiene más ácido clorogénico.

De hecho, se presume que este componente el que aporta grandes beneficios a la salud. Entre sus funciones está la de liberar los vasos sanguíneos, regular la presión arterial, facilitar el flujo de azúcar en el organismo y controlar el metabolismo.

Además, el café verde contiene menos cafeína que el café normal. Su sabor es más amargo y el olor es más fuerte.

No hay estudios científicos que relacionen sus atributos con tratamientos sobre la diabetes o el sobrepeso.

Contrario a las amplias recomendaciones que se hacen para su consumo, también existen contraindicaciones o riesgos cuando el café verde se ingiere.

Algunos de los efectos secundarios que presenta tienen que ver con la presencia de la cafeína. Si bien está en menor escala que el café convencional, de todas formas puede causar dolor de cabeza, agitación, ansiedad e irregularidades en el ritmo cardíaco. Pacientes con diagnósticos cardiovasculares o con problemas de circulación deberían evitarlo en la medida de lo posible.

Asimismo, afecta la forma en que el azúcar es procesada, contrario a lo que muchos apuntan. Por esto, podría aumentar el riesgo a que se padezca de diabetes.

Puede aumentar la ocurrencia de una crisis para aquellas personas que sufran de epilepsia. Otros que deben abstenerse de probarlo son las personas con sensibilidad en el estómago, así como quienes están consumiendo los siguientes medicamentos: efedrina, adenosina, alendronato, cimetidina, clozapina, u otros. Las mujeres embarazadas o en lactancia deben evadirlo.

Finalmente, el ácido clorogénico, el cual tantos aportes ostenta ofrecer, también incrementaría los niveles de homocisteína, lo que representa un aumento en las posibilidades de sufrir de un accidente cardiovascular.