Descubra “la tierra del cine”: un pueblo mágico en México con aguas termales y bosques ancestrales

México es un país lleno de contrastes, historia y belleza natural, conocido también por sus “pueblos mágicos”, lugares que combinan tradiciones, arquitectura y paisajes únicos.

Uno de ellos es el estado de Durango, que destaca como un destino que ofrece una experiencia inolvidable para los amantes de la cultura y la naturaleza.

Conocido como la “tierra del cine”, este lugar ha sido escenario de numerosas producciones cinematográficas debido a su variada geografía y paisajes impresionantes.

Durante su visita, los turistas pueden encontrar desde desiertos hasta bosques ancestrales, su riqueza natural lo convierte en un lugar único. Además, su gastronomía auténtica, que incluye platillos como el caldillo durangueño, deleita a los paladares más exigentes.

Otro dato importante para conocer sobre este destino es que no solo el cine lo define, ya que también cuenta con balnearios de aguas termales que ofrecen descanso y renovación en medio de majestuosos bosques ancestrales.

Por esta razón, desde el sitio web de la Secretaría de Turismo del estado de Durango señalan que muchos lo conocen también como un “lugar de agua”, descubierto en 1552 por el capitán español Ginés Vázquez de Mercado, quien se encontraba buscando una mítica montaña de plata y terminó encontrando un gran cerro de óxido de hierro.

Con su mezcla de tradición, aventura y lujo, este estado y sus rincones mágicos hacen que viajar por México sea una experiencia enriquecedora y sorprendente.

Se encuentra situado en el centro-noreste de la república mexicana y está dividido en 39 municipios, de acuerdo con la misma fuente. En sus inicios recibió el nombre de su descubridor europeo: Cerro de Mercado, pero se le denomina Guadiana por su similitud con el Valle de Guadiana, en España.

“Durango es una palabra de euskera y significa al otro lado del agua”, agrega la entidad, que además afirma que un viaje por Durango es conocer sus orígenes a través de sus emblemáticas construcciones, apreciando diversos templos, museos y atractivos que forman parte de su historia.