¿Qué hacer en Ginebra Valle en un día?

En pleno valle del Cauca y casi en la entrada del Parque Nacional Natural las Hermosas, queda el hermoso municipio de Ginebra, un lugar lleno de música, dulce y sabor del Valle del Cauca. A la entrada de este bello y muy colorido municipio se encuentra el monumento a La Bandola, instrumento típico de la música colombiana, e imagen del concurso de Música Andina y Colombiana, Mono Núñez.

“El Concurso Mono Núñez se ha constituido en plataforma de lanzamiento de nuestros artistas y el solo hecho de clasificar para Ginebra es parte importante de su carta de presentación; mucho más, por supuesto, lo es el de ser nominado o ganador del Gran Premio “Mono Núñez”. El Festival, con el correr de los años, hizo de Ginebra un polo de desarrollo turístico y cultural, pues, paralelamente con lo musical,  fueron apareciendo restaurantes que promueven la cultura gastronómica del Valle del Cauca y que dan empleo a gran cantidad de personas. Además, el flujo de turistas ha estimulado, la formación de microempresas que cada día producen artesanías de mejor calidad”, indica la alcaldía del municipio en su página web.

Inmediatamente, el visitante entra al pueblo, puede encontrar las calderas de cortado de leche hirviendo a punta de leña mientras las hacendosas vendedoras retiran la espuma de la leche para formar el rico manjar típico del Valle. Ginebra también es conocida por su vino artesanal de uva Isabela, producida en las montañas del departamento del Valle del Cauca. Además, el visitante se puede deleitar con la imponente catedral de nuestra Señora del Rosario, y las deliciosas obleas del parque central, hechas con materiales cultivados en el mismo departamento.

Además, Ginebra ofrece gran variedad de restaurantes campestres llenos de actividades y propicios para celebrar cualquier tipo de ocasión, desde matrimonios hasta cumpleaños acompañados de toda la familia. Además, el pueblo también ofrece balnearios de piscina natural, piscinas artificiales y ríos de aguas diáfanas y cristalinas. En conclusión, Ginebra es un pueblo pequeño y acogedor que ofrece diversidad de planes familiares y para parejas que puede ser visitado en cualquier época del año.