Con plantón frente al CAM este miércoles, rechazaron toque de queda extendido en Cali

Cerca de 400 personas, entre propietarios y empleados de varios establecimientos nocturnos, artistas y trabajadores del gremio en Cali adelantaron un platón este miércoles frente al Centro Administrativo Municipal, CAM, para exigir a la Administración, alternativas al toque de queda alternado y la ley seca, vigentes hasta el 22 de enero. Aseguran que las medidas, decretadas por el alcalde Jorge Iván Ospina para desacelerar los contagios de covid-19 y descongestionar la red hospitalaria de la ciudad, impiden el sostenimiento de sus negocios. Dicen que si las autoridades no toman acciones, muchos de ellos tendrán que cerrar definitivamente. Con carteles, arengas y bloqueos intermitentes sobre la Avenida 2da Norte, pidieron garantías para el funcionamiento de restaurantes, bares, moteles en la capital del Valle, que aún no se recuperan financieramente del cese de sus actividades en el 2020, cuando el Gobierno Nacional decretó cuarentena obligatoria.

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Cerca de las 2:00 p.m. la concentración se desplazó hasta la plazoleta y se presentó un incidente menor en la puerta de ingreso del CAM, al parecer porque la seguridad privada intentó cerrar la puerta cuando los manifestantes arengaban exigiendo la presencia de un comité.

Luego, en ese mismo espacio, voceros de diferentes gremios entablaron una mesa de diálogo en la que participaron Carlos Alberto Rojas, Jimmy Dranguet y Argemiro Cortés, los encargados de las dependencias de Seguridad, Inspección, Vigilancia y Control, y Desarrollo Económico, respectivamente. Solicitaron a las autoridades medidas alternativas al toque de queda extendido durante los fines de semana y que sea reconsiderado el horario en semana para la restricción, entre otras cosas. Por ahora, no hay pronunciamientos oficiales al respecto.

Además, se llevará a cabo un encuentro entre dueños de restaurantes y gastrobares de Cali de otras zonas, y delegados de la Alcaldía para discutir un pliego de peticiones concertado en las últimas jornadas que incluye propuestas similares, encaminadas a favorecer la operación de estos negocios e impulsar la reactivación económica de la ciudad.

Antes el secretario de Desarrollo Económico Municipal, Argemiro Cortés, había explicado que la Alcaldía está buscando diferentes salidas para solventar la crisis de estos negocios. Una de ellas, donar alimentos a aquellos trabajadores de los bares, discotecas y restaurantes que estén muy mal. “Podríamos estar hablando de 8000 a 10.000 mercados porque más de eso no tenemos capacidad de compra”, dijo. Y agregó que desde el despacho también se está considerando la opción de otorgar “subsidios para el pago de arriendos y servicios públicos. Un tercer elemento a mediano plazo es hacerle préstamos al sector productivo para su reactivación económica. Estamos hablando de una bolsa de $30.000 millones que tenemos que sacar de recursos del emprésito para poder dar ese apoyo y apalancar recursos por $60.000 millones a través de Bancoldex o el Fondo Nacional de Garantías para prestarle a los empresarios”. Entre el 19 y el 22 de enero, tanto el toque de queda como la ley seca en Cali inician a las 8:00 p.m. y rigen hasta las 5:00 a.m. de la siguiente jornada. Además, está vigente el pico y cédula que restringe el ingreso a establecimientos comerciales.