Salario mínimo 2021: ¿qué tanto se afectará el aumento por la pandemia?

Cada año, por esta época, trabajadores y empresarios se preparan para el tire y afloje que representa la negociación del salario mínimo.

En 2019 no hubo acuerdo en la mesa de concertación integrada por gremios, empresarios, gobierno y trabajadores. Por eso el alza del 6%, que dejó el salario en $877.802, se produjo por decreto del Gobierno.

Este año el debate será más angustioso y difícil, teniendo en cuenta la crisis económica que atraviesa el país y que ha dejado la pandemia del Covid-19. Se estima que el Producto Interno Bruto, PIB de Colombia caerá por encima del 7% en 2020, hay más de 3,7 millones de desempleados y aún están cerradas muchas empresas que no han podido reactivarse.

Con este panorama, Julio César Alonso, director del Centro de Investigación en Economía y Finanzas de la Icesi, dice que un incremento salarial por encima del 3% será muy difícil.

“Hay que tener en cuenta elementos como: una inflación que estará muy cercana al 2%, la tasa de desempleo a unos niveles muy altos, 17% ó 18%, y adicionalmente un déficit fiscal en aumento”.

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Por eso cree que es muy probable que el aumento para el 2021 esté muy cercano a la inflación causada; es decir, cercano al 2%. De ser así el aumento sería de $17.556 para un total de $895.358.

Esa misma idea la tiene Álvaro José Henao, presidente de Smurfit Kappa, quien cree que este año se debe balancear la necesidad de aumentar el poder adquisitivo de los trabajadores y la situación de las empresas, “en especial de las pequeñas y medianas que son las más afectadas por la pandemia y también son las más impactadas por el aumento del salario mínimo”.

En Colombia alrededor de 10 millones de personas se ganan el salario mínimo, según datos del Ministerio de Trabajo.

“Lo que he oído de propuestas de alza del 15 % me parece irreal, comparado con un una inflación cercana al 2%”, comentó Henao, quien considera que no hay forma que las empresas resistan un aumento de esa magnitud, el cual considera alto incluso para empezar una negociación.

“Lo que hay que buscar es que las empresas, que están muy afectadas y que son las que generan el empleo, puedan seguir manteniéndolo”, aseguró.

Cálculos de la Asociación Nacional de Instituciones Financieras, Anif, indican que los hogares colombianos han perdido ingresos este año por $24,1 billones, esto porque muchos perdieron su trabajo y por la reducción en las ventas.

Este punto, considera Iván Jaramillo, miembro del Observatorio Laboral de la Universidad del Rosario, debe ser tenido en cuenta en la discusión del alza salarial, dado que en un periodo de reactivación debería estimularse la demanda agregada y fortalecer la capacidad adquisitiva de los trabajadores para que la recuperación sea más rápida.

Por eso cree que el alza debe estar muy por encima de la inflación, que solo es un elemento a tener en cuenta y recordó que el salario mínimo en Colombia ($877.806) tiene un rezago histórico frente al valor de la canasta familiar que tiene hoy un valor de $1,3 millones.

“Se necesita que la gente tenga plata en el bolsillo, si eso no pasa y se deteriora el salario, además de seguir el rezago no habrá consumo. No es casual que Fenalco proponga anticipar el pago de la prima porque son conscientes de que se requiere inyectar recursos a los hogares”, comentó el académico.

Para este analista, los trabajadores han sido los más golpeados con la pandemia porque perdieron el empleo o vieron reducido su salario. “El Gobierno ha dado ciertos apoyos como subsidio a la nómina y se merece una respuesta en cierta sintonía con eso por parte de los empresarios”.

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De acuerdo con un informe del Banco de la República en 2019 el 47% de los trabajadores colombianos ganó $828.116 o una cifra inferior, Asimismo, se estima que alrededor de 10,7 millones de personas devengan el salario mínimo.

Debido a que los empresarios han tenido una reducción de ingresos y aún así muchos mantuvieron sus nóminas y asumieron los costos fijos durante la pandemia, Brany Prado, director de Acodrés en Cali, propone que el alza del salario mínimo en 2021 no se haga en enero sino que se postergue para mitad de año.

“Más o menos en julio de 2021, cuando el país estaría logrando una estabilización económica se podría aplicar el alza que no podría superar el 5% y es absurdo, descabellado e indolente que las centrales hablen fuera de contexto y piden alza del 15%”.

Recordó el directivo que solo en el sector gastronómico en el Valle del Cauca han cerrado más de 2000 negocios por falta de dinero y los que quedan aún siguen pagando los costos fijos que nunca pudieron rebajar en los meses de confinamiento.

Algunos analistas consideran que el país debe empezar a discutir la opción de implementar salarios diferenciales, ya sea por sectores, a partir de un mínimo, o por regiones, zonas urbanas y zonas rurales.

La representante de las Mipymes en el Valle, Yitcy Becerra, aseugró que no es claro que el año 2021 será de crecimiento y considera que hay incertidumbre frente a lo que vendrá para la economía y los hogares.

En ese sentido aseguró que “sabemos cuáles son los beneficios de que la gente tenga plata, eso dinamiza la economía, el consumo, ayuda a estabilizar la situación, pero hay que tener en cuenta el momento complejo que atraviesan las empresas”.

Mientras tanto, los trabajadores argumentan que aún no han hecho ninguna propuesta de incremento salarial y que entienden lo que ha sucedido este año con la economía.

Sin embargo, consideran que la pandemia no puede ser una disculpa para castigar a los sectores más empobrecidos que son las personas que devengan el mínimo.

.”El problema es que si antes trabajaban dos personas por unidad familiar ahora solo trabaja uno, por la pérdida de empleo tanto en el sector formal como informal”, comentó Julio Roberto Gómez, presidente de la Confederación General de Trabajadores, CGT.

Las centrales obreras esperan llegar a la mesa de concertación del salario con una posición conjunta y esperan que haya un debate transparente.

De acuerdo con investigadores de la Universidad de los Andes, la negociación del salario mínimo de 2021, debe ser más que nunca, un factor fundamental para la generación de empleo.

Por ello consideran que el país no puede este año “simplemente seguir inercialmente la costumbre de incrementar el salario en un monto igual a la inflación más un reconocimiento adicional. Es hora de revisar los antecedentes de esa costumbre, escarbar en los principios que la generaron y exigir a los participantes en la mesa de negociación que consideren cuidadosamente esos principios a la luz de las circunstancias actuales, incluyendo las de quienes no tienen allí asiento”, dijeron en la Nota Macroeconómica que produce la Facultad de Economía.

Consideran que un salario mínimo alto afectará el empleo y aumentará la informalidad.

Otros investigadores proyectan que el incremento salarial podría ser del 2,5% para 2021, teniendo en cuenta que la inflación terminaría el año por debajo del 3%.

Un alza del 2 % en el salario mínimo para el año 2021 significaría un incremento de $17.556.

Con un aumento del 4 %, el sueldo de unos 10 millones de trabajadores en Colombia crecería en $35.112

Y con el 6 %, incremento que se ha dado en los dos últimos años, el repunte del salario estaría en $52.668, es decir que el mínimo quedaría en $930.474.

Uno de los puntos en contra de un alza mayor del salario está relacionado con que con ese valor se ajustan muchos pagos como salud, Soat y los sueldos en el sector público, lo que podría impactar la inflación.