Un nuevo caso lamentable de intolerancia ocurrió al caer la tarde de este viernes, 28 de febrero, en Cali. La Secretaría de Movilidad local informó que el agente de tránsito 404 fue golpeado con un palo, lo que lo llevó a perder el conocimiento, por lo que tuvo que ser llevado de emergencia a un centro asistencial.
“En la Carrera 5 con Calle 13, siendo las 18:15, un sujeto que venía transitando en una motocicleta sin placa estaciona su vehículo y agrede con un palo al compañero 404, causando un trauma en la cabeza con sangrado”, detalló sobre el caso el organismo de la Alcaldía Distrital de Cali.
“El sujeto sale corriendo sobre la Carrera 5 y no logra ser identificado”, añadió la Secretaría. Luego se reportó que el agente agredido fue ingresado en el Centro Médico Imbanaco.
Con este, ya son 15 los casos de agentes agredidos que se reportan en los primeros dos meses del año. Estas cifras se suman a los 34 hechos de agresiones contra agentes de tránsito que la Secretaría de Movilidad de Cali registró durante el año 2024.
Uno de las más recientes ocurrió el pasado 17 de febrero en la Calle 13 con Carrera 4, también en el centro de la capital del Valle. Los funcionarios se encontraban en medio de un operativo de control, cuando uno de los conductores requeridos los agredió con su vehículo.
La agresión quedó registrada en una cámara de seguridad de uno de los locales comerciales de la zona, donde quedó evidenciado que el hombre que se movilizaba en una van con logos de una empresa de telecomunicaciones tuvo la intención de llevarse por delante al funcionario.
Al respecto, el secretario de Movilidad, Gustavo Orozco, rechazó este tipo de ataques en contra de los funcionarios encargados de regular el tráfico en las calles. “De ninguna forma toleraremos que sigan al volante quienes consideran que manejar es un chiste, que no conlleva responsabilidades y que creen que no pasará nada llevándose por delante un agente de tránsito”, enfatizó en su momento.
Hay que señalar que la agresión a servidor público, según el artículo 429 del Código Penal, se paga con una pena de prisión que oscila entre 4 y 8 años. De hecho, en la capital vallecaucana, ante el incremento de estos casos en los que los agentes terminan agredidos, un equipo jurídico adelanta procesos que buscan sanciones severas contra los ciudadanos que incurran en este tipo de conductas.