Salsa de tomate, palomitas de maíz, pepinillos en vinagre, café y otros alimentos que creíamos inofensivos para los dientes, son los más dañinos.
En Colombia el 89,5 % de los adolescentes (15 a 19 años) ha tenido caries en su vida y el 76 % de adultos (de 30 a 34 años), ha presentado caries no tratadas, según el último Estudio Nacional de Salud Bucal en Colombia. De acuerdo con dicho estudio, a la edad de 5 años el 60 % de los niños han tenido caries y en promedio cada niño tiene tres dientes cariados, extraídos u obturados. Y a los 12, el 72 % de los niños tiene caries y cada uno de ellos tiene 2 dientes con caries, obturados o perdidos.La caries dental sigue siendo un problema que afecta en algún momento de la vida a las personas, especialmente a los niños y los adultos mayores, y en mayor proporción a las poblaciones vulnerables, afirman Ángela María Franco y Stefanía Martignon, directoras de Alianza por un Futuro Libre de Caries, Capítulo Colombia. Esta última es una iniciativa que trabaja en pro de generaciones libres de caries en Colombia. Según los expertos es una enfermedad que se puede prevenir desde sus primeras etapas de formación y controlarse antes de que deje secuelas, como las cavidades, previniendo así restauraciones o inclusive la pérdida de los dientes afectados. Por ello hoy en día hay un cambio de enfoque sobre la forma como los servicios de salud, los profesionales y las comunidades deben controlarla.Atacarlas de raízEn el pasado, la caries era una lesión que ya presentaba cavidad y su tratamiento se reducía a la restauración de la estructura del diente, a través de un material dental como amalgama o resina.Actualmente, debido a los avances científicos, la caries es tomada como un proceso y no solo se trata médicamente la lesión resultante. Ese proceso de desmineralización del esmalte se presenta por un desequilibrio persistente entre la superficie dental y la placa bacteriana. Si el paciente tiene buenos hábitos alimenticios y de higiene bucal y buen control médico, la placa bacteriana no representa una amenaza para la formación de caries. La placa bacteriana de pocas horas de formación y en situaciones de riesgo bajo de caries, se mantiene en equilibrio con la estructura dental. En la boca, así como en el esmalte dental, hay un contenido alto de minerales, como calcio, fosfato y fluoruro, con un pH que en ambas zonas tiende a ser neutro, es decir, ni ácido ni básico. Sin embargo, si a esa placa bacteriana se le permite madurar, por falta de higiene bucal, mala alimentación y un pobre autocuidado, ese equilibrio se ve amenazado. El medio externo pierde minerales y se vuelve ácido con valores de pH por debajo de 5.5, causando la pérdida de minerales del diente. En dichas condiciones el esmalte dental llega a un punto de desmineralización que puede derivar en lesión de mancha blanca o café sin signos de ruptura del esmalte. Esta puede convertirse en una lesión moderada, una microcavidad, y luego en una lesión extensa, que requiere restauración. Debido a lo anterior la lesión de la caries será progresiva, y cada vez más severa, a no ser que se modifiquen las condiciones y se reestablezca el equilibro. De ahí que los odontólogos sean enfáticos en la necesidad de prevenir, antes que curar, en materia de caries.Alimentos que dañan los dientesEl consumo excesivo de pan disminuye el esmalte dental. También algunos cafés, debido a la tierra en donde se cosechan, son muy ácidos y esto provoca debilidad en los dientes. Quien es consumidor habitual de café, debe beber una botella de agua tras cada taza, así se enjuaga la boca y se reduce el pH.El azúcar en exceso provoca daños en la dentadura, al igual que el ácido de los pepinillos en vinagre, que al comerlos más de una vez al día aumenta el desgaste de los dientes en un 85 %. La salsa de tomate contiene vinagre y ácido acético que perforan los dientes y disuelve su esmalte. Se recomienda lavarlos después de comer esta salsa, e ingerir salmón, cerdo o huevos para fortalecer los dientes. Y malas noticias para los amantes de las palomitas de maíz, ricas en carbohidratos y azúcares que, al combinarse con los gérmenes, se fermentan y forman ácido láctico, que disuelve la capa externa de los dientes. El daño comienza a los siete minutos de ingerirlas. La pasta daña el esmalte dental y el vino mancha los dientes.Los expertos recomiendan aplicar fluoruro en barniz cada cuatro o seis meses, o en gel cada tres meses, sellar las fosas y fisuras dentales que acumulen placa y asistir a citas odontológicas de refuerzo cada cuatro meses.Tips de prevención Se requieren al menos dos cepillados diarios con crema dental con flúor y tres veces por semana el uso de seda dental. Y evitar el consumo de alimentos o bebidas distintas a agua en la noche después del último cepillado. Llevar un control médico si hay alteraciones en la cantidad o calidad de la saliva (hiposalivación/xerostomía). Se debe acudir al odontólogo para que haga una valoración del riesgo de caries, y un examen clínico de las lesiones. Limitar la ingesta de carbohidratos a uno diario o menos, y el número de comidas a cinco veces al día.