La estatua de Sebastián de Belalcázar fue retirada de su pedestal este jueves, luego de que un grupo de las comunidades indígenas del Cauca intentara derribarla, en medio de la primera jornada del Paro Nacional en Cali que se llevó a cabo este miércoles 28 de abril.
El alcalde Jorge Iván Ospina explicó en sus condiciones actuales existía el riesgo de que se viniera al piso accidentalmente, poniendo en riesgo a las personas que acuden al emblemático mirador.
Por ahora, la pieza de dos toneladas aproximadamente será reparada, dado que sufrió daños serios en la base especialmente.
Sin especificar si será reinstalada o en qué momento se haría, el mandatario afirmó que "la sociedad caleña también debe tener monumentos para los pueblos afro e indígenas. No se puede narrar nuestra historia sin ellos".
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También se mostró dispuesto a establecer un diálogo con estas comunidades con el propósito de construir un escenario pacífico y equitativo de participación.
La solicitud que hizo este miércoles el Movimiento de Autoridades Indígenas del Sur Occidente, Aiso, es que la imagen del español se retire definitivamente en el Valle y el Cauca. Consideran que mantener este tipo de monumentos es desconocer la historia de las comunidades indígenas en esta zona del país.
En septiembre del año pasado esta colectividad también derribó la estatua de Belalcázar en Popayán y aún no ha sido reinstalada.
La acción despertó una gran polémica entre la comunidad caleña, donde algunos sectores apoyan que sea reemplazada, mientras algunos como el gremio turístico consideran que debe mantenerse en ese punto.
El monumento está ubicado en el barrio La Arboleda entre la Carrera 2 Oeste y las Carreras 2 A y 3A. Allí también hay un mirador y es considerado como una referencia de la ciudad y un punto turístico.