En el emblemático Park Way de Bogotá, ubicado en el barrio Teusaquillo, se tejía una oscura trama criminal que mantenía un firme control sobre el tráfico de marihuana en la zona.
Durante más de siete meses, una intensa investigación llevada a cabo por la Policía Metropolitana de Bogotá logró desmantelar esta peligrosa organización y detener a sus seis integrantes, destacando entre ellos a alias Millos, el cerebro detrás del negocio ilícito que operaba desde hacía más de dos años.
Michael Misael, también conocido como alias Millos, era reconocido como un ferviente hincha del equipo capitalino, pero detrás de esta fachada se ocultaba el responsable de dirigir el tráfico de drogas en Teusaquillo.
A pesar de su corta edad, apenas 25 años, alias Millos, originario de Fusagasugá, había logrado consolidarse como una figura central en el mundo del narcotráfico en el área.
Su socio en esta banda criminal era otro individuo conocido como alias España, debido a su nacionalidad. España tenía la tarea de seleccionar a jóvenes que serían entrenados para convertirse en distribuidores de drogas. Llevaba a estos aspirantes ante alias Millos para obtener su aprobación y, así, ingresar a la red delictiva.
Este equipo delictivo de seis personas logró acorralar a los vendedores ambulantes y a otros traficantes de la zona, tomando control total del territorio y la renta criminal generada por la venta de marihuana en pequeñas cantidades.
Se tomaron el Park Way
Para consolidar su dominio, alias Millos ejecutó una estrategia que involucró expulsar a los vendedores ambulantes del Park Way, incluyendo a los tinteros, chanceros y vendedores de comida ambulante. Los presionó hasta que abandonaron la zona, permitiéndole así controlar cualquier actividad comercial en este transitado corredor de la ciudad.
Según lo señalado por los investigadores, los precios elevados de la droga se justificaban por la gran afluencia de ciudadanos extranjeros en la zona.
Así distribuían
La estructura criminal liderada por alias Millos estaba diseñada de manera meticulosa. Cada 200 metros, entre dos y tres jóvenes, denominados jíbaros, estaban en constante vigilancia. Este sistema aseguraba que nadie intentara robar.
El ingenio no solo se manifestaba en la organización sino también en la forma de camuflar la droga. Conscientes de que ser atrapados con más de 30 cigarrillos de marihuana por la Policía podría llevarlos a enfrentar cargos más graves, los traficantes solo llevaban consigo un máximo de 20 cigarrillos de marihuana.
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Invima lanzó alerta sanitaria por gomitas con marihuana que se venden sin registro sanitario
El Instituto Nacional de Vigilancia de Medicamentos y Alimentos (Invima) ha lanzado una urgente alerta sanitaria en respuesta a la creciente circulación de gomitas adulteradas con marihuana en Colombia. Este fenómeno ha causado preocupación entre padres de familia, ya que estos productos están siendo vendidos sin autorización y representan un serio riesgo para la salud de los menores de edad.
Engaño a menores de edad
Los delincuentes detrás de esta problemática han empleado tácticas despreciables para atraer a menores de edad, quienes desconociendo la verdadera naturaleza de estos dulces, han caído en su trampa. Estas gomitas, que contienen una dosis de THC, el componente principal de la marihuana, se presentan como osos de goma y están marcadas con la palabra TRRLLI, asemejando al producto legítimo TROLLI.
Estos productos, que contienen posibles ingredientes activos del cannabis, han sido distribuidos en algunos colegios, poniendo en grave riesgo la salud de los menores que los consumen.
Aldor, la compañía de golosinas involucrada en este escándalo, ha tomado medidas legales ante esta situación preocupante. En un comunicado, la empresa insta a los padres a estar alerta y verificar minuciosamente los paquetes de golosinas que sus hijos adquieren antes de permitir su consumo.
La compañía expresó su preocupación ante las noticias que circulan en las redes sociales y se comprometió a tomar acciones enérgicas contra las personas inescrupulosas que han distribuido estas gomitas a menores de edad.