Son ‘instagramers’, viajeros empedernidos, usan las redes sociales, ven Netflix. Son creadores, directores de blogs, incluso, algunos pueden ser integrantes de destacadas selecciones deportivas a nivel nacional. Pero su principal característica es que hacen lo que les plazca sin importarles el qué dirán. Ellos son una generación de millennials con más edad. Se hacen llamar ‘Viejenials’, la mayoría de ellos están anclados a una red de internet y viven bajo el precepto de que nunca se es demasiado viejo para hacer lo que se quiere.

Este movimiento nació en España en 2016, por iniciativa de Isabel Sánchez, collagista de 55 años; Constanza Lucadamo, quien a sus 60 años cuenta sus experiencias de viajes en su perfil de Instagram; Ángel Fernández, de 65 años, quien se dedica al periodismo y a los blogs digitales y Manuel Arroyo, que a sus 49 años constituyó viejenials.com.

La página web fue ideada gracias a un grupo de amigos que decidió reunirse un par de tardes a beber café. Y se ha hecho tan fuerte que hoy día estos amigos han organizado grandes eventos como la realización de una pasarela para personas de 50 años en adelante, en una de las ferias de moda más importantes de España, el Sur Fashion Experience, en Andalucía. Han suscitado el interés publicitario en España de Meritene, una gama de suplementos nutricionales y de la empresa de bebidas Aquarius, que otorgará las becas Viejenials.com, las únicas para el emprendimiento social dirigidas a personas mayores de 60 años. Por ejemplo, crearán una escuela de danza moderna para un público de la tercera edad.

Del mismo modo, mantienen contacto con grupos en países como Perú, Panamá, Chile, Canadá, Estados Unidos y Colombia, los cuales están interesados en trabajar contra la discriminación que se tiene contra quienes tienen una edad avanzada.

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En Viejenials.com se habla acerca del estilo de vida, relaciones personales, salud, viajes, placeres de la vida adulta y por supuesto, de la era digital. Y realizan convocatorias para bailarines, caminantes e incluso, modelos.

“A partir de los 50 años somos casi que invisibles, somos demasiado viejos para estar en el mercado laboral, pero, por otro lado, somos demasiado jóvenes como para que se nos considere un grupo vulnerable”, opina en diálogo con El País, una de las fundadoras de este grupo, Isabel Sánchez, quien agrega que la discriminación por edad se convirtió en una motivación para trabajar por la visibilidad de las personas mayores.

De que los hay los hay

En Colombia, aunque no existe un movimiento constituido como en España para realzar los derechos de las personas mayores, esta tendencia de los viejenials sí se alcanza a evidenciar con actores que defienden los mismos ideales y se han escapado del convencional concepto de vejez, que para una de las creadoras de viejenials.com, Constanza Lucadamo, se relaciona con “que a nuestras edades somos dependientes, doloridos, poco atentos, lentos y enfermos”.

Esta instagramer de 60 años, en entrevista con El País, desde España, asegura que los de su edad viven siendo estigmatizados con prejuicios de hace un siglo, es por esto que realiza una invitación a que “la vejez sea vista como una etapa más de la vida, tan excitante y valorada como la juventud”.

Uno de los actores sociales que comparten este pensamiento en Colombia es Farid Barbosa, un periodista deportivo de 62 años, quien por más de dos décadas ha administrado su página www.colombiadeportiva.co, utiliza las redes sociales como cualquier millennial y asegura que “son tantas las posibilidades para utilizar las nuevas tecnologías que nadie debería cerrarse a ellas, todos tenemos la misma capacidad de aprender y usarlas cada vez más”.

Barbosa asegura que nos encontramos en una era de cambios y es necesario que adoptemos lo que el mundo nos ofrece, teniendo en cuenta siempre el concepto de unión. “Considero que en Colombia nos hacen falta líderes para organizar y direccionar un movimiento como lo es Viejenials, pienso que podría hacerse algo muy grande e importante con las personas de mi generación, ya que hemos vivido un gran cambio tecnológico y social”.

Del mismo modo, integrantes de la Selección Súper Senior de la Liga Vallecaucana de Bolos como Magnolia Espinosa, de 57 años; Beatriz Davis, de 65, Gustavo Rincón, de 75 años, y María Teresa Arboleda, de 68, alzaron sus voces para hablar sobre este tema.

Ellos, que llevan más de 15 años jugando bolos, aseguran que esta es una pasión que, además de hacerlos sentir activos, los hace parte de un equipo en el que no importa la edad.

Gustavo Rincón resalta que “el deporte integra y esto es importante, ya que permite que puedan jugar en un mismo espacio un joven de 15 hasta una persona de 100 años si está en condiciones aptas”.

Por su parte, Magnolia Espinosa, quien ha representado a la Selección Valle y a la Selección Colombia en los Juegos Panamericanos y Suramericanos de Bolos, asegura que su vivencia en este campo ha sido la mejor. “Juego con mis hijos, con los amigos de mis hijos y soy feliz, porque me parece que soy muy afortunada por haber nacido en la época en la que nací y por las experiencias que he tenido siendo deportista”.

Del mismo modo María Teresa Arboleda habla acerca de su concepto de vejez, pues considera que no representa un impedimento para hacer lo que se quiere. “Creo que la edad es simplemente un número. Yo me siento como si tuviera 20 años, cada vez con más energía, compitiendo en bolos me siento muy bien. Pero creo que las personas tienen una idea diferente de los mayores, pareciera que no se dieran cuenta de que uno está vivo”.

A pesar del valor que le dan a la transición informática y social en una era de millennials, mujeres como Beatriz Davis, pensionada e integrante de la Liga de Bolo del Valle, dicen que la falta de oportunidades para los adultos mayores genera exclusión social. “Se nos trata como si estuviéramos en proceso de morir, cuando estamos llenos de vitalidad y queremos estar en movimiento, pero siendo aceptados, apoyados y sobre todo, visibles”.

Los Silvers

- Según un estudio de Proximity y Raddar los llamados Silvers tienen hoy entre 60 y 75 años  y representan casi el 10 % de los usuarios digitales en la actualidad.

- Se trata de adultos mayores que han decidido sumergirse en la era digital, sin dejar de apreciar los medios análogos que conocen desde hace décadas.

- Un silver está en capacidad de usar WhatsApp, Twitter, Hotmail y luego sentarse a leer su periódico favorito o escuchar la radio.

- Son audaces, consumen tecnología, pero prefieren usarla por periodos de tiempo, compran suplementos nutricionales, pero no creen en fórmulas milagrosas.

- Los silvers en Colombia se caracterizan por ser activos.

- El 22 % de ellos realiza deporte, el 14 % manualidades, el 29,4 % asiste a eventos culturales y se caracterizan por haber aprendido a mecanografiar en una máquina de escribir y en la actualidad lo hacen sin problema con un Smartphone.

- La mayoría de estos cuentan con una pensión, pero no están ni un poco interesados en dejar de trabajar.

- Son individuos activos, les interesan los deportes, emprender, y por supuesto, las nuevas tecnologías.

- El analista socio político y sociocultural de Raddar y vicepresidente corporativo, Samir Campo, expresa que “estos individuos tienen un relato, mucha sabiduría, experiencia en la toma de decisiones y el cómo se deben hacer las cosas. Es por esto que el mercado debería contratarlos, no solo para enseñarles sobre los nuevos procesos, sino para que ellos puedan enseñar sobre lo que han vivido”.

- Sin embargo, desde la perspectiva de Samir Campo hay que trabajar en un reto importante. “Lo más seguro es que necesiten un computador, un asistente, letras más grandes, pero, sobre todo, que se les dé la oportunidad de enseñar toda la sabiduría que han acumulado a través de los años, porque eso es algo que en los colegios y en las universidades no enseñan. Actualmente estamos dejando en manos de la tecnología la responsabilidad de pensar históricamente cuando tenemos a nuestros viejos para que nos ayuden a entender lo que está fuera del panorama tecnológico”.