Luego del intento de golpe de Estado en Bolivia, varios presidentes y comunidad internacional salieron en rechazo de lo que estaba ocurriendo contra el gobierno de Luis Arce Catacora, desde Asunción, Paraguay, donde se instalaba, al mismo tiempo que ocurrían los desmanes, la Asamblea General de la OEA.
Entre los asistentes al evento, y quien envió un mensaje de respaldo al mandatario, fue el canciller de Colombia, Luis Gilberto Murillo, quien reiteró este jueves que América Latina seguirá unida para cuidar de la democracia en Bolivia y en toda la región.
En diálogo con Bluradio, el Ministro de Relaciones Exteriores reveló que Colombia propondrá en la Asamblea de la OEA establecer un tribunal para juzgar a los golpistas y contó que se está trabajando en una ruta que permita tener un escenario donde se pueda juzgar este tipo de conductas.
El miércoles, conocerse los detalles de lo que estaba ocurriendo en La Paz, la OEA emitió un comunicado donde señaló que “no tolerará ninguna forma de quebrantamiento del orden constitucional” en Bolivia.
“Expresamos nuestra solidaridad con el presidente Luis Arce Catacora. La comunidad internacional, la secretaría general de la OEA no tolerará ninguna forma de quebrantamiento del orden constitucional legítimo en Bolivia”, afirmó el secretario general de la organización, Luis Almagro.
Como fue conocido, tanquetas y tropas ocuparon la Plaza Murillo, en el centro de la capital boliviana, donde está la sede presidencial. Una tanqueta intentó tumbar una puerta metálica del palacio presidencial, al cual ingresó posteriormente el general Juan José Zúñiga, comandante del Ejército.
“Denunciamos movilizaciones irregulares de algunas unidades del Ejército Boliviano. La democracia debe respetarse”, escribió el presidente Luis Arce en su red social X, durante la situación.
Además, en la asamblea, el representante de Bolivia, Héctor Arce Zaconeta, denunció el “acto ostensiblemente violento” que ocurría en su país y pidió a los demás miembros que se redacte una resolución al respecto.