La Sala Penal del Tribunal Superior de Bogotá dejó en firme la culpabilidad de Amanda Azucena Castillo por los delitos de ocultamiento de pruebas y falsa denuncia, en el caso de Sergio Urrego, el estudiante que se suicidó, luego de ser víctima de homofobia.
Sin embargo, el Tribunal redujo su condena de 10 años y ocho meses, a ocho años y ocho meses y revocó la orden de prisión.
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Esta decisión fue tomada en una audiencia virtual por la magistrada Eva Ximena Ortega Henao, quien argumentó que Amanda Azucena Castillo no debe ir a prisión porque se cumplen los requisitos para tomar esta medida.
Según la magistrada, los delitos por los que fue condenada no impiden que pueda obtener prisión domiciliaria y tiene arraigo familiar y social. “Lo anterior porque se puede verificar su lugar de residencia, además sostiene relación personal y social que la pueden mandar a un lugar específico”, añadió la magistrada.
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Esta diligencia inició pasadas las 8:30 de la mañana relatando los hechos y las razones por las cuales el Juez 43 del Circuito de Bogotá tomó la decisión inicial en donde destacó que esta decisión se basó en argumentar que “la presión, acoso, discriminación y humillación vivido por Sergio Urrego no puede repetirse en otro niño de este país, la labor fundamental de los establecimientos educativos es apoyar, fortalecer guiar a los jóvenes y superar todas esas políticas discriminatorias por encima del cumplimiento de unos resultados”.