Tras una semana de manifestaciones frente a la sede de la Agencia Nacional de Tierras (ANT) en Bogotá, las comunidades indígenas Embera, provenientes de Risaralda, Cauca y Chocó lograron ayer, jueves 28 de noviembre, un acuerdo histórico con la entidad.
La negociación, que se extendió por cuatro días, culminó con compromisos que garantizan mejores condiciones para sus resguardos, la concreción de proyectos productivos, y la titularidad de nuevas tierras, y el acceso a servicios esenciales para combatir la desnutrición infantil, la falta de vías adecuadas y el limitado acceso a servicios de salud y educación.
“Para Risaralda es un momento histórico, está recibiendo nuevas tierras, nuevos resguardos, y lo que hace es que uno se llene de alegría, que no alcanza uno a describir y que de ahora en adelante ustedes saben que allí hay 46.000 indígenas que batallan día a día contra la muerte”, dijo uno de los voceros de la comunidad indígena, al cierre de la reunión.
Cabe decir que, en el transcurso de este viernes 29 de noviembre, las comunidades indígenas volverán a sus territorios tras alcanzar estos acuerdos claves con la ANT. Así, a esta hora la entidad se encuentra concretando la logística para que hoy retornen a su territorio.
Cabe decir que, según manifestó Marco Fidel Guasarave, líder del Consejo Mayor Indígena de Risaralda, “Lo logrado en estas mesas es un paso importante para la dignidad de la comunidad Embera. Nos vamos con compromisos concretos, pero estaremos atentos a que lo pactado se cumpla”, expresó.
No obstante, se refirió a un preocupante panoráma en sus comunidades, el de la desnutrición, condición por la que han muerto, en los últimos dos años, al menos 110 niños de la comunidad Embera. “Este es un primer paso, pero no podemos permitir que más niños sigan muriendo por falta de atención básica”, enfatizó Guasarave.