Un nuevo ataque de los grupos al margen de la ley sacudió a los colombianos, esta vez en Nátaga, Huila, en donde subversivos, quienes pertenecería a las disidencias de las Farc, atacaron la estación de policía con ráfagas de fusil, dejando dos uniformados muertos.
“El reporte oficial que he recibido por parte de los comandantes, tanto de Policía como de Ejército, es que la estación de Policía del municipio de Nátaga fue objeto de unos hostigamientos por parte de un grupo armado, procedente desde el sector de San Luis que es una zona rural que pertenece al municipio de Páez Cauca”, señaló el secretario de Gobierno del Huila, Juan Carlos Casallas Rivas.
Según versiones preliminares delo ocurrido, los uniformados trataron de repeler el ataque terrorista, pero fueron alcanzados por balas que les segaron la vida en el lugar de los hechos.
Los uniformados que perdieron la vida en este ataque fueron identificados como el intendente Leonardo Trujillo, comandante de la unidad que fue atacada, así como el patrullero Carlos Andrés Hernández Ospina.
De igual manera, un civil que atendía a los uniformados resultó herido con un proyectil y está siendo ha tendido en el hospital local de dicha población.
“En este momento hay un helicóptero artillado sobrevolando el municipio de Nátaga, ya llegó el refuerzo del Grupo Especial de Operaciones de la Policía, adicionalmente a eso se desplazó un pelotón de Caballería Liviano de la Novena Brigada, del Ejército y ya se retomó el control del casco urbano”, enfatizó el funcionario.
Poco después del hostigamiento, al municipio llegaron refuerzos con tropas del Ejército, quienes ya tomaron control de la zona para evitar nuevos ataques como este.
Este es un nuevo a ataque de los grupos armados a la Fuerza Pública, ya que tan solo el pasado 9 de octubre había ocurrido la baja más reciente de las fuerzas armadas en combates con la guerrilla. Se trató del fallecimiento del soldado profesional Rodney Pérez Vaquero, quien murió luego de una incursión del ELN en Teorama, en Norte de Santander.