Así lo indicó Atlas Global de Justicia Ambiental. Indicó, si embargo, que en el país no se reconocen tales conflictos haciendo el problema más difícil.
Colombia es el país con más conflictos ambientales en el mundo, reveló Atlas Global de Justicia Ambiental en el marco del foro 'Conflictos socio-ambientales en el siglo XXI' que organizó la Universidad del Rosario. Uno de los miembros de la Academia Colombiana de Ciencias Naturales y Exactas, Julio Carrizosa, indicó que lo paradójico es que se supone que hay un consenso a nivel político sobre cómo ejercer control en este ámbito. La zona Andina de Suramérica, desde Chile hasta La Guajira, está cargada de conflictos en minería, en gestión de recursos, en biomasa, en conflictos por tierra, en combustibles fósiles y en conflictos por el agua, entre otros, dijo el profesor de la Universidad Javeriana, Manuel Pérez. Pérez, quien hizo parte de la investigación Gestión Ambiental Territorial, que realizó la Universidad Javeriana y la CAR Cundinamarca, señaló que Colombia tiene un problema de reconocimiento de conflictos ambientales, al no saber en dónde están, qué información existe y qué derechos tiene la gente. Un reconocimiento que pasa por entender al otro en su localidad, en su vereda, por decirlo así, en su escala territorial, indicó el profesor de la Javeriana. Asimismo, Carrizosa dijo que además de la falta de comprensión por los problemas ambientales, la sociedad se ha acostumbrado a simplificar las características del mismo, como cuando se dice que somos un país con mucha riqueza, reduciendo así el análisis de la complejidad ambiental del país, agregó. Somos un país traumatizado por los efectos de la violencia, porque el narcotráfico nos ha hecho ver como un país criminal y porque la corrupción ha permitido que los dos anteriores prosperen, agregó Carrizosa. Explotación de recursos y medio ambiente Para el profesor Manuel Pérez, hay una explotación poco consciente de los recursos. Cuando se abre un boquete estamos abriendo nuevos mundos que no sabemos qué afectación tengan sobre el equilibrio natural. Así podemos ver cómo los habitantes de Malambo denuncian que hay plomo en la sangre de los niños o en La Guajira más de 80 mil niños amenazados por la sequía. Es por esto, que muchos de los conflictos que se presentan por razones de extracción de minerales surgen debido a la coincidencia de asentamientos humanos muy densos con la existencia de recursos minerales y el clima tropical, explicó Carrizosa. Para el profesor Pérez, una muestra de lo anterior es Cundinamarca, donde aproximadamente tres cuartas partes del departamento tienen avances de procesos de expansión urbana, sin tener en cuenta cómo esa ocupación afecta en el proceso del agua. Por ejemplo, el impacto a los páramos. Soluciones a conflictos ambientalesSegún Pérez, los conflictos socio-ambientales en Colombia deben enfrentar tres factores de análisis: 1- Redistribución económica: Cuánto se gana y cómo se gana teniendo presente la conservación. 2- Reconocimiento: Determinar que hay actores sociales que se mueven con o sin el estado. 3- Representación: No ha habido un pacto común para reclamar las necesidades ambientales. Si se logra un diálogo para buscar consensos entre ambientalistas, institucionalidad y empresa, integrando a las comunidades afectadas y a la sociedad civil, será posible encontrar formas de solución de conflictos, asó lo concluyó el investigador Julio Carrizosa.