En diálogo con Revista Semana, Henry Acosta, hombre clave para que Juan Manuel Santos negociara con las Farc, entregó detalles inéditos de ese proceso. Además, reveló de quién es la culpa de que no se esté implementado lo pactado y aseguró que el acuerdo de paz quedó mal hecho por un tema importante. Además, dijo que el ELN quiere imponer el socialismo en Colombia.
Recientemente, el presidente Gustavo Petro afirmó que expondría ante la ONU la falta de implementación del acuerdo de paz, lo que Acosta consideró irónico, ya que Petro, como jefe del Ejecutivo, es responsable de su ejecución.
“Solamente una vez en la vida he hablado con Gustavo Petro y fue cuando era candidato en 2022. Me mandó llamar y hablamos aquí en Cali. Es muy raro eso que está diciendo, porque resulta que él es el Ejecutivo del Estado. Entonces, va a decir: vea, yo soy el que ejecuto las leyes, pero no he ejecutado el acuerdo final, que está en la Constitución de Colombia. Entonces, raro eso. Además, hace dos meses vino el Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas y dicen que van caminando las cosas”.
Sobre por qué no se está implementando los acuerdo de paz ya acordado con las Farc, Acosta identificó dos problemas graves: la falta de financiación específica y la falta de un plan de reincorporación para los excombatientes. Relató que, en La Habana, advirtió a Timochenko sobre la ausencia de un plan financiero en el acuerdo, y que tanto Sergio Jaramillo como Juan Manuel Santos conocían esta deficiencia. Además, mencionó que Santos dejó la responsabilidad de la reincorporación al próximo gobierno, lo cual calificó como un error grave.
“Hay dos cosas graves. La primera es que estando en la Habana (Cuba), y faltando unos dos meses para la firma, le dije a Timochenko: “Timo, yo nunca he visto lo que llevan ustedes redactado, muéstreme”. Él me mostró el fólder y papeles, que me puse a revisar. A las dos horas le dije que el acuerdo final es un proyecto social, económico y político, y todo proyecto tiene un qué, un cómo se va a hacer, un cuándo se va a hacer, un para quién se hará, un dónde se hará y lo más importante que es con qué. En lo escrito no había nada sobre con qué lo harían. Las Farc no sabían de eso y no habían caído en cuenta”, comentó Acosta.
Agregó que Sergio Jaramillo y el ex presidente Juan Manuel Santos sí sabían que un proyecto tiene que tener un con qué y no lo pusieron. “¿Dónde está la plata? Eso fue gravísimo en el acuerdo de paz. Lo otro, y se lo dije a Juan Manuel Santos el 18 de julio de 2018, es que él debía dejar todo montado para la reincorporación de los excombatientes, y él me dijo: “Henry, yo se lo dejo al que me suceda, porque yo ya logré lo que quería, que era que ellos entregaran las armas y se pusieran a hacer política”. Muy grave, porque si no se reincorporaron, pues saldrán a rebuscarse a través de lo que saben hacer y es con delitos. Lamentablemente, eso está pasando”.
Precisamente, según Acosta, Romaña habló en ese entonces con Jean Arnault, jefe de la Misión de las Naciones Unidas, en una reunión en la que también estuvo Pablo Catatumbo. Allí Arnault expuso la que sería la nueva misión, que era la reincorporación, y cuando terminó, Romaña le dijo: “Usted ha tocado el punto más importante del acuerdo, porque si no se reincorporan todos los compañeros vamos a terminar en unas 400 o 500 bandolas sin mando único. Entonces, sería mejor que nos hubiéramos quedado en el monte porque nosotros tenemos mando único”.
Por otra parte, Acosta cuestionó el mensaje contradictorio de Petro sobre la implementación del acuerdo y relató conversaciones con el ELN, quienes según él buscan instaurar un régimen socialista en Colombia, una idea que Acosta considera inviable.
“No pueden pretender que estos grupos armados acepten del presidente o del Gobierno una negociación sabiendo que él (Gustavo Petro) está diciendo que no se ha implementado lo anterior. Ahora, el ELN se ha sentado cerca de 16 veces con los Gobiernos y yo hablé con ellos antes de la negociación de Quito, en Medellín”.
“Hablamos durante seis horas y me dijeron que ellos estaban pensando en la toma del poder y, una vez tomado el poder, quieren convertir a Colombia en un país socialista. Les dije que países socialistas no habrá más en el mundo y que se olvidaran de eso, y les conté lo que decía Alfonso Cano sobre el capitalismo con economía de bienestar. Y el otro tema del que hablamos es que ellos quieren meter al pueblo al diálogo, entonces, les dije que su diálogo iba a durar 100 años. Y si usted mira la agenda que están trabajando en este momento, verá que todo gira alrededor de la participación popular”, puntualizó Acosta.
Asimismo, comentó que, en una reunión con Petro en 2022, sugirió abordar diálogos selectivos con grupos ilegales y evitar negociaciones dentro de Colombia para reducir interferencias.
“Sí, nos reunimos por 25 minutos y me dijo que le diera opiniones sobre cómo debían tratarse los grupos ilegales. Le dije que empezara con la Segunda Marquetalia, que tenía un objetivo político, que no empezara con todos, y que cuando tuviera avances buscara otro frente de diálogo. No le recomendé acercarse al Clan del Golfo y le dije que no conocía a la gente de Iván Mordisco. Le dije que no hiciera los diálogos en Colombia ni en un país limítrofe y que fuera lejos para evitar interferencias y declaraciones sin necesidad, porque se convierte en un huevo roto que no lo arregla nadie”.
¿La implementación se puede resumir en esa última frase?
“Sí, es un huevo roto sin arreglo, porque nadie sabe cuánto cuesta, nadie tiene cifras. Escuchamos cifras sueltas o por separado, pero no un total”.
¿Quién es el culpable de que esté pasando esto?
“Todos desde el inicio, incluso las mismas Farc como delegación, porque no sabían del tema de plata, pero tenían asesores, entonces la culpa es de todos”.
Iván Márquez apareció recientemente en un video apoyando la constituyente de Petro, Acosta explicó que en su parecer, esto se dio porque Márquez nunca estuvo de acuerdo con los diálogos de paz, prefiriendo una estrategia de toma del poder. Junto con otros líderes, optó por abandonar el proceso tras recibir amenazas del Clan del Golfo. Ya ahora probablemente busca una constituyente para introducir cambios socialistas en la Constitución, incluyendo la implementación del acuerdo firmado en Cartagena y no el del teatro Colón.
“Iván Márquez no estaba de acuerdo con los diálogos, porque él y Santrich tienen la misma posición del ELN de tomarse el poder para implementar el socialismo”
¿Por qué no estaba de acuerdo?
“Alfonso Cano murió el 4 de noviembre de 2011. La agenda de paz ya había sido aprobada en agosto de ese mismo año y el 17 de noviembre empezaban los diálogos de paz. Como murió Cano, el que tenía que reemplazarlo era el más antiguo en el secretariado y ese era Iván Márquez. El que iba a viajar a La Habana como jefe de delegación era Timochenko, que era el jefe de inteligencia de las Farc, pero Márquez dijo que no aceptaba porque debía apoyar los diálogos y no estaba de acuerdo. El secretariado le dijo que pidiera licencia, lo que significa que podía irse sin problema de la guerrilla, o que lo nombraban jefe de la delegación. Márquez no quiso salir de las Farc y nombraron a un opuesto de los diálogos como jefe de la delegación, y por eso fueron tan difíciles y pasaron tantas crisis. Entonces, Timochenko no integró la delegación y quedó como comandante general de las Farc, pero dos años después él decidió irse a La Habana porque la cosa no iba caminando bien. No llegó a reemplazar a Márquez, pero sí a tener un diálogo directo con Santos”.
Y agrego: “Algo de lo que casi no se ha hablado y es que se firmó el acuerdo, y Otoniel, jefe del Clan del Golfo, envió un mensaje a la cúpula del partido Farc diciendo que iban a capturar a Márquez, a Santrich y al Paisa. Por eso se fue al monte y como vieron drones y cosas raras se fueron para Venezuela. Romaña y Márquez decidieron irse, después se fue Santrich con la ayuda de un exguerrillero argentino y se fueron todos. Es un resumen”.
¿Pero ahora a Márquez si le interesa la paz?
“Pues seguramente él piensa que con una constituyente van a definir un país socialista. Hay una cosa que olvidé y es que la Segunda Marquetalia va a pedir que se ponga en implementación el acuerdo final firmado en Cartagena, no el del teatro Colón. Y por la pregunta puedo deducir que Márquez pide la constituyente porque sacarían de la Constitución el acuerdo del teatro Colón y meten el de Cartagena, pues el último fue el que se sometió al plebiscito”.
Finalmente, Acosta expresó incertidumbre sobre el futuro de la paz total, recordando que los ceses al fuego previos fortalecieron a las Farc y recomendando que las negociaciones se lleven a cabo en medio de las confrontaciones para evitar fortalecimientos indebidos de los grupos armados.
“La verdad que no sé en qué terminará lo de la paz total. Estamos en el agujero negro porque está muy complicada la situación. Y aprovecho para decir que el cese al fuego en el proceso del Caguán fue fatal para el país porque las Farc se fortalecieron. Las negociaciones deben ser en medio de las confrontaciones”.