“A mí lo que me están dando es una miserableza del Estado (...) 320 mil pesos, dos escoltas y un carro, eso es un irrespeto, con eso le digo todo”, indicó Elí Mendoza, uno de los integrantes más antiguos de la guerrilla de las Farc.
Estas declaraciones las dio a conocer Mendoza, identificado con el alias de Martín Sombra, en medio de una entrevista que dio a la Revista Semana.
Allí indicó que se sentía indignado por el valor que le estaba pagando el Estado y sobre su esquema de seguridad, ya que considera que los beneficios que ha recibido son una “miserableza”.
Eli Mendoza, alias Martín Sombra, es uno de los excomandantes de la guerrilla de las Farc más conocidos y de los cuales al desmovilizarse recibieron algunos beneficios del Gobierno nacional. Además, se hizo terriblemente célebre debido a su participación en homicidios y masacres. También ganó notoriedad como “El carcelero de las FARC”.
Se le atribuye la creación de campos de concentración en la densa selva colombiana, donde la guerrilla mantenía secuestradas a decenas de personas en condiciones inhumanas, encerradas en corrales llenos de alambres de púas, durmiendo en el barro y sin acceso a baños para sus necesidades. A pesar de todo esto, Sombra se declara como un hombre de fe y creyente de Dios.
En medio de sus declaraciones a la Revista Semana se refirió sobre Rodrigo Londoño, conocido en la guerrilla como Timoleón Jiménez o Timochenko, jefe máximo de las Farc.
“Yo mencioné todas las muertes de Timoleón Jiménez y ni siquiera le prestaron atención”, expresó.
En los inicios de Timochenko en la guerrilla fue, “un individuo que llegó por allá en el año 84 cuando la Coordinadora Guerrillera Simón Bolívar, vino desde Medellín. Como los burros, los afines se buscan para rascarse, Jacobo era político y él era un letradito, entonces lo destinaron a la Hernando González Acosta”.
Cabe mencionar que en otra ocasión, durante una entrevista con SEMANA, Sombra arremetió contra Timochenko, a quien calificó de traidor.
Masacre de Mapiripán
El pasado 13 de julio, en medio de unas declaraciones que Elí Mendoza, alias Martín Sombra, entregó a la Jurisdicción Especial para la Paz (JEP) se conoció su participación en la masacre de Mapiripán, la cual no fue cometida por paramilitares apoyados por hombres del Ejército Nacional, sino que fue autoría de las Farc.
El excombatiente sorprendió al admitir que él y sus tropas fueron los responsables de la masacre de Mapiripán en 1997, uno de los eventos más trágicos en la historia del conflicto armado en Colombia.
En sus declaraciones, Martín Sombra afirmó: “Me están acusando a mí de la masacre en Mapiripán, pero Rito del Río no tuvo nada que ver; fue una tropa mía llamada Marco Aurelio Buendía. Nos acostumbramos a cometer atrocidades y luego atribuirlas a otros”, así lo informó Blu Radio, que tuvo acceso a la audiencia reservada.
Además, Martín Sombra también negó la implicación del general Rito Alejo del Río en estos hechos. El exalto oficial está siendo investigado por la JEP debido a su presunta participación en esta masacre y otros actos en colaboración con los paramilitares.
Estas revelaciones han cambiado en gran medida lo que se conocía hasta el momento, dado que exparamilitares como Salvatore Mancuso y Darío Antonio Úsuga, alias Otoniel, habían señalado previamente que la masacre fue perpetrada por las Autodefensas con la complicidad de altos mandos del Ejército.
La Corte Interamericana de Derechos Humanos (Corte IDH) incluso condenó al Estado colombiano por su supuesta connivencia con el paramilitarismo. Varios militares han sido investigados y condenados por estos actos.
Las declaraciones de Martín Sombra también revelaron el trato inhumano que recibían los menores de edad que formaban parte de las filas de las FARC. Según su testimonio, se llevaban a cabo “consejos de guerra” en los que se definían sanciones, e incluso fusilamientos, contra los menores que no cumplían con las directrices de la organización.