Tras pasar varios meses de sequía, la capital de Colombia está pasando por una fuerte lluvia que afecta a varios barrios de Bogotá, provocando fuertes inundaciones y grandes trancones.
Las precipitaciones han sido tan fuertes que desataron inundaciones en vías principales de la capital colombiana, entre ellas la carrera séptima (con calle 36 y calle 53), la avenida Caracas (con calle 53) y la avenida Ciudad de Cali (con calle 132).
Desde el Instituto Distrital de Gestión de Riesgos y Cambio Climático (Idiger), aseguraron que la ciudad seguirá pasada por agua: “Se espera continúen las lluvias en las próximas horas”.
“Necesitamos muchas lluvias más para que los embalses recuperen su nivel. Por eso debemos seguir reduciendo nuestro consumo”, aseguró el alcalde de Bogotá, Carlos Fernando Galán.
Así mismo, desde la cuenta de X del Tránsito de Bogotá manifestaron algunas vías que se encuentran inundadas y le solicitan a la ciudadanía transitar con precaución.
Por otro lado, otra de las noticias que da algo de esperanza a los bogotanos es que cayó un fuerte aguacero en el embalse de Chuza, que hace parte del sistema Chingaza, el cual aporta el 70% del agua potable en Bogotá y que actualmente es uno de los más críticos del sistema con 14,56 %.
Sin embargo, las autoridades advierten que un día de lluvia no es suficiente para restablecer los embalses a niveles óptimos, por lo que la medida del ahorro del agua seguirá siendo una prioridad para la ciudadanía.
Los niveles críticos de almacenamiento registrados en el mes de agosto del 2023 (que representó solo el 61% de su capacidad) y las reservas hídricas extremadamente bajas para el 10 de abril de 2024, de 15,91%, constituyen las condiciones más desfavorables registradas en el embalse de Chuza durante los últimos 25 años. Esta situación tiene múltiples causas que incluyen, entre otras, factores climáticos, deforestación en la Amazonia colombiana, aumentos en la demanda y posibles efectos asociados con la operación del embalse.