Continúa la intensa búsqueda de los cuatro niños desaparecidos en las selvas del Guaviare, los militares, organismos de socorro y miembros de la comunidad, no pierden la esperanza de encontrarlos en algún punto de la zona.
Desde el aire, las fuerzas militares también refuerzan la búsqueda, es por esto, que han implementado varias estrategias para que los menores puedan sobrevivir y tengan conocimiento de que su familia los espera.
Desde los helicópteros del Ejército Nacional y la Fuerza Aérea Colombiana se realizan labores de perifoneo con la voz de la abuela que buscan orientar a los niños extraviados.
De igual manera, con el apoyo del Instituto Colombiano del Bienestar Familia (ICBF) que decidió lanzar kits de supervivencia en la zona de búsqueda. Estos paquetes se encuentran equipados con dos botellas de agua, dos sueros, alimentos y algunos elementos como bengalas y silbatos.
Asimismo, han lanzado y dejado a lo largo de la selva, más de 10 mil volantes con colores llamativos que resaltan entre la selva, en estos, les piden a los niños en español y en el lenguaje de su comunidad, que no se muevan, que los están buscando y que en lo posible, den señales de humo.
“Los estamos buscando. No se muevan más, quédense cerca a un caño o quebrada. Hagan ruido. Hagan humo. Los vamos a salvar. Estamos cerca. Su abuela Fátima y la familia los están buscando”, dice el volante.
Según el reporte de las autoridades, los niños están desparecidos un área de aproximadamente 17 km x 19 km, haciendo más compleja su ubicación, pese a contar con 150 comandos del Ejército que se encuentran en tierra con megáfonos, pitos y otros elementos en la incansable labor de ubicar a los cuatro hermanos, cuya madre falleció en el accidente de la avioneta que se movilizaba desde el Amazonas hace más de dos semanas.
Sin embargo, el general Pedro Sánchez, comandante de las Fuerzas Especiales, comunicó que no se ha encontrado ninguna pista nueva desde las últimas huellas vista en la selva, las cuales corresponderían a la menor de 13 años, de acuerdo con el cuadrante 39 del Ejército, responsable del hallazgo.
Ante este panorama, optaron por creer en la fuerza de la naturaleza. “Le pedimos a la madreselva que mire con ojos de bondad a quienes estamos buscando a los cuatro menores”, expresó el general Pedro Sánchez.
A la búsqueda también se sumó Manuel, padre de los 2 niños y padrastro de las 2 niñas quien se encuentra junto a los uniformados en el operativo desde el primer día. El ciudadano agradeció a todas las personas que están apoyando las labores de rescate y espera encontrar a los menores con vida.
Igualmente, a través de la red de emisoras Colombia Estéreo, los soldados del Ejército Nacional que desempeñan su labor como locutores radiales, han emitido de manera constante mensajes de búsqueda y cuñas informativas con el fin de reunir información que permita localizar y dar con el paradero de los menores.
“Este es un llamado para que quienes tengan información sobre el paradero de los niños accidentados en la avioneta. Las emisoras del Ejército Nacional trabajan de manera articulada con la comunidad para encontrar a estos pequeños en la selva colombiana”, es el mensaje transmitido a través de las ondas herzianas.
Las emisoras del Ejército Nacional gozan de una amplia cobertura y audiencia lo que servirá para poder llegar a los radios de campesinos, indígenas y habitantes de apartadas zonas para que, con información puedan apoyar la Operación Esperanza.
Su paradero sigue siendo un misterio
Por su parte, Fidencio Valencia, abuelo de los cuatro menores desaparecidos, manifestó que es muy extraño que pese a las intensas búsquedas y a las pistas frescas que se encontraron hace unos días, aún no se haya dado con ellos.
“Esa zona tiene misterio. Los niños ya no son guiados por la niña, tiene que haber alguien guiando, pero no es ni indígena, nadie, es algo de esa región. Por eso estoy pidiendo que allá los indígenas de esa región, en la parte tradicional, si conocen de un espíritu, si conocen el idioma, nos ayuden”, aseveró el abuelo para Blu Radio.