Por los delitos de secuestro simple agravado, homicidio agravado y hurto calificado y agravado, la Interpol emitió circular roja en contra de Gustavo Aníbal Giraldo Quinchia, el jefe del ala militar del ELN conocido como ‘Pablito’, que tiene bajo su cargo el llamado Frente de guerra oriental e integrante del Comando Central (COCE) desde 2015.
‘Pablito’ se mueve en la zona de Arauca, Boyacá y Casanare. Ingresó a las filas guerrilleras en 1997 para cometer acciones delictivas en inmediaciones de Arauquita. Por su conducta bélica, en el año 2000 asumió como comandante del frente Domingo Laín Sáenz.
Informes de inteligencia militar y policial reseñan que estando en esta facción elena, el Laín Sáenz multiplicó su fuerza y poderío expandiendo su influencia en Arauca.
‘Pablito’, también conocido como Carlos Marín Guarín, fue detenido en 2008 en Bogotá y trasladado hasta una prisión en Arauca, pero en 2009 se fugó de la cárcel en un hecho que aún hoy resulta cinematográfico.
Esta es la segunda circular roja que se expide en contra de un integrante del ELN este mes. La primera fue en contra de Nicolás Rodríguez Bautista, ‘Gabino’, por lo que ambos son buscados en los países miembros de la Interpol.
La Fiscalía, por su parte, le adelanta varios procesos a ‘Pablito’, el más reciente está relacionado con el secuestro de los periodistas en la zona del Catatumbo, entre quienes se encontraba la española Salud Hernández.
“El material probatorio que reposa en diferentes expedientes daría cuenta que dicha instrucción sería promovida desde los máximo jefes del ELN hasta los cabecillas regionales, quienes incidirían en los medios de comunicación locales para que emitan información relacionada con actividades violentas, en medio de amenazas de retenciones de los periodistas o robo de los equipos de comunicación”, expuso en su momento el ente acusador.
Con respecto al paradero de Giraldo Quinchía, se presume que es Venezuela, por lo que el Gobierno de Nicolás Maduro tendría que colaborar con su entrega, de lo contrario estaría violando el tratado de la Interpol lo que supondría una eventual complicidad con los jefes de esa guerrilla.
En 2016, la Fiscalía informó que los máximos jefes guerrilleros del ELN eran investigados por crímenes de guerra relacionados con 15.896 actos de esta naturaleza entre los que se encontraban delitos de lesa humanidad.
Actualmente, los diálogos de paz entre esa guerrilla y el Gobierno de Colombia se encuentran suspendidos, motivo por el cual el pasado 3 de octubre, alias ‘Pablo Beltrán, jefe negociador del ELN en la mesa, envió una misiva a la Comisión de Paz del Senado en la que manifestaba su deseo de continuar adelante en el proceso.
Por su parte, el presidente Iván Duque reiteró el martes que no dará orden para un cese del fuego bilateral hasta que ese grupo no dé muestras de paz. “El ELN tendrá en nuestro Gobierno toda la disposición para establecer conversación si y solo si liberan todos los secuestrados y les pone fin a todas sus actividades criminales. No queremos más secuestros en Colombia, no queremos más terrorismo en Colombia”, dijo el mandatario tras una reunión con el expresidente de España, José María Aznar.