Gracias al trabajo conjunto con la comunidad de El Azúcar, en la zona rural de Tumaco, Nariño, y entendiendo los riesgos a los que está expuesta en el marco de los conflictos armados, el Comité Internacional de la Cruz Roja, Cicr, rehabilitó y dotó el puesto de salud de la vereda ubicada en el Alto Mira y Frontera.
“Sabemos lo importante que son para estas comunidades tener atención médica básica en su territorio, por eso apoyamos este proyecto tras detectar la necesidad y se empezó a trabajar de la mano con los mismos pobladores, quienes de una forma espontánea y muy comprometida, aportaron todos sus conocimientos para llegar a feliz término con esta iniciativa”, explicó Alice Liani, delegada del Cicr para Tumaco.
En este puesto de salud podrán recibir atención las personas más afectadas de esta y otras 10 comunidades aledañas que presentaban dificultad de acceso a servicios de salud, dado que el puesto de atención más cercano estaba a casi dos horas de camino, por eso la urgencia de construirlo en esta zona, para facilitarle la vida a estos pobladores.
Al volver a entrar en funcionamiento, este puesto de salud será administrado por el Hospital Divino Niño de Tumaco, esto como el compromiso adquirido por las directivas del hospital con estas comunidades de trabajar por condiciones más dignas para las mismas.
Y como es una zona con presencia de actores armados, desde ya tanto líderes sociales como integrantes del Cicr hicieron un llamado a los mismos para que se respete la Misión Médica y se permita la atención a las personas que lo necesitan.
“Para nosotros mejorar el acceso a servicios básicos de salud, como en este caso, es fundamental. Por eso dotamos y rehabilitamos este puesto tras escuchar a la comunidad y construir con ellos una alternativa que mitigue el impacto de los conflictos armados en su vida”, agregó Alice Liani.
Esta es una labor que realiza el Cicr en Colombia y otros países de la región, en coordinación con las autoridades sanitarias, el personal de salud, obrero y administrativo de esta clase de municipios, así como con personas de las comunidades en los casos que aplica; con el objetivo de que los pacientes puedan acceder a los servicios de salud.
Tal como lo expresó la representante de la entidad humanitaria en ese departamento, es clara la determinación de estar del lado de las personas en tiempo de guerra, así sean civiles o combatientes, para que los derechos y las protecciones que les confiere el DIH sean respetados sin importar dificultades territoriales.
“Trabajamos para llevar ayuda vital donde más se la necesita, para que la vida pueda retomar la normalidad y para que regresen las sonrisas. Nuestro compromiso se mantendrá durante este año”, acotó la delegada del Cicr para Tumaco.